Para este fic les recomiendo que escuchen las versiones clásicas de Proud y hug.
W: Always keep the faith
Nos
conocimos por casualidad a lo largo de este camino.
El
día de entrenamiento había terminado. Junsu, junto a sus otros compañeros de la
unidad de policía, regresó al dormitorio que compartían y se despojo de su
pesado atuendo. En cuanto llego a su cama, se quito las botas que le
aprisionaban los pies y soltó un soplo de alivio cuando sus pies al fin
pudieron respirar. Que maravillosa sensación, más aun después de una jornada
larga. Realmente hoy había sido un día agotador y lo único que quería era
acostarse y descansar para siempre.
Y
eso era justamente lo que sucedería.
Junsu
miró entonces el reloj que estaba en su mesita de noche: Eran exactamente las
10:00 pm. Era hora de irse a dormir.
Uno
de sus compañeros se levantó a apagar la luz pero antes de que pudiera hacerlo,
otro compañero, el cual había estado ausente durante las últimas prácticas de
la tarde, se presento luciendo un tanto desequilibrado. La piel debajo de sus
ojos tenía un leve color rojizo, su rostro se veía demacrado. Parecía como si
hubiera pasado por una traumática experiencia.
Eso
les pareció extraño a los demás.
El
hombre sin mediar palabra con alguno, fue directo al mueble al lado de su cama
y se quito su chaqueta, preparándose él también para dormir. Al verlo
comportarse como todas las noches, los demás se resistieron de hacerle
preguntas acerca de su anterior ausencia y continuaron con lo suyo.
Sin
embargo algo terrible ocurrió después.
Sin
razón aparente, el hombre saco un revolver de uno de sus cajones y le disparo
al muchacho que dormía al lado de la cama de Junsu. El impacto fue tan violento
que chorros de sangre salieron volando por todas partes. Los demás hombres
presentes en la habitación empezaron a gritar asustados y Junsu solo se quedo
sentado en la cama, paralizado ante la situación.
Su
celular sonó en ese momento. El tono que tenía pertenecía a una vieja canción
conocida.
El
sonido llamo la atención del hombre.
Lo
que vio Junsu después fue al hombre acercarse y dirigir el arma hacia su
frente.
Luego
él hombre apretó el gatillo.
..
“♪ ♫
¿Hubiera pensado así al principio?, por eso no soltare esa mano, siempre la cuidare
diligentemente… Nos conocimos por casualidad a lo largo de este camino. ♪ ♫”
Yoochun
desistió de llamar a Junsu cuando marco por quinta vez sin obtener respuesta
alguna. Tan solo se escuchaba el tono del celular, cantando una y otra vez esa
parte de aquella canción la cual pertenecía a su pasado.
Desolado,
Yoochun dejo a un lado su celular y se dirigió a la tina de su baño que ya se
había llenado con agua puesta previamente. Despojándose de su ropa, Yoochun se
metió en ella y puso algo de música… solo para servir de contraste con lo que
haría a continuación.
Se
sentía tan miserable. Durante esos meses su depresión había empeorado y ya no
sabía cómo salir de ella. Lo había perdido todo. Había perdido el respeto de la
industria y de la gente. Había manchado el nombre de su familia y el de sus
amigos. No sabía si algún día podía remediarlo, no sabía si tendría la
suficiente fuerza para hacerlo. Se sentía acabado, sin rumbo en este mundo. Quizá
esto que tenía en mente era lo mejor que podía hacer. Quizá esta era la mejor
forma de redención.
Dejar
de existir era su única forma de pedir perdón.
Con
lágrimas en sus ojos, Yoochun tomo una bolsa llena de cocaína que había puesto
en el borde de la tina. Coloco hileras del polvo cuidadosamente en la
superficie y luego las aspiro por la nariz. Vaya eso lo hizo sentir tan bien. De
un tiempo para acá, era lo único que lo consolaba, era ahora su más fiel amigo
en el mundo.
Su
confidente y su escape de la realidad.
Tomo
luego su celular, mandando un mensaje de texto mientras más lágrimas se le
escapaban y en su consola empezaba a sonar la melodía de aquella canción que
tenia Junsu como tono de llamada. La simple melodía le hizo sentir como si le
estuvieran clavando un cuchillo y luego sacando el corazón.
Y
es que todo esto era tan… triste. Tan triste e injusto.
Sin
esperar que la persona a la cual le había mandado el mensaje le respondiera,
Yoochun arrojo su celular lejos y acomodo su nuca en el borde de la tina. Canto
un poco para sí, repaso las letras que aun se sabía, la parte final de la
canción. Luego con sus ojos cerrados, se sumergió completamente en la bañera,
convenciéndose que esto sería la solución a todo. La imagen de su madre, su
fallecido padre y su hermano menor se le atravesó en la mente.
Un
recuerdo de su infancia apareció de manera fugaz.
Después
el aire comenzó a faltarle. Sus pulmones se llenaron de agua.
La
canción dejo de sonar.
..
“Si estás aquí a mi lado, inclusive lo
más profundo de mi alma, se sentirá cómodo con este gentil recuerdo… Nos
conocimos por casualidad a lo largo de este camino”
Jaejoong
parpadeo confundido a la pantalla de su celular la cual le mostraba el mensaje
que Yoochun le había enviado, exactamente a las 10:00 pm de la noche. Jaejoong
conocía de donde provenían esas palabras, era la letra de aquella canción de
cuando estaban todos juntos ¿Por qué Yoochun se la enviaba a esa hora tan
aleatoriamente?
Tal
vez se sentía nostálgico. Quizá. Era algo usual en él.
Cerrando
el buzón de mensajes y abriendo la aplicación de instagram, Jaejoong hizo una
mueca a la cámara y se tomo una selca, poniendo en el pie de la foto una frase
que estaba seguro que contentaría a la mayoría de sus fans.
Jaejoong
se encontraba en el área de primera clase del vuelo con destino a Japón, donde tomaría
unas merecidas vacaciones luego de su gira de conciertos. El avión aun no había
emprendido vuelo. Las azafatas terminaban de dar las instrucciones de seguridad
y el piloto le hablaba a los pasajeros como era de rutina.
Jaejoong
regreso su vista al celular, viendo con satisfacción como la foto ahora tenía
casi 10.000 likes y un montón de comentarios. Se rió traviesamente al ver que
sus fans habían reconocido la letra de la canción, y que ahora mandaban mensajes
“OT5”, “Yunjae” y más. Un sentimiento cálido se le instalo en el corazón al ver
tal reacción.
A
continuación, el avión inicio su marcha hacia el despegue y Jaejoong se abrocho
su cinturón. No paso mucho antes de que el avión consiguiera la velocidad requerida
y en un segundo adquiriera vuelo. El despegue había sido exitoso… o eso era lo
que se creía. De un momento a otro y como si se tratara de una pesadilla, el
avión perdió vuelo, las alarmas comenzaron a sonar, las mascarillas de oxigeno
salieron del techo. Al parecer una falla mecánica se había presentado y ahora
era demasiado tarde para corregirla.
Asustado,
Jaejoong se llevo su celular al pecho, sintiendo su cuerpo enfriarse y sus
labios temblar. ¿Este era su fin? No lo sabía, todo estaba pasando tan rápido como
para ponerse a analizar. La turbulencia aumentó de intensidad y Jaejoong llevo
su cabeza hacia sus piernas, poniéndose en posición fetal. Las lágrimas
comenzaron a escapar de sus ojos.
Su
celular vibró entonces de una manera extraña y Jaejoong vio la pantalla antes
de que todo se pusiera oscuro. Un comentario atrapo su vista:
“Caminando
a través del escenario con el cual ya me he familiarizado, sin ser capaz de
escapar de esos recuerdos distantes… Nos conocimos por casualidad a lo
largo de este camino”
El
avión choco contra el suelo.
..
Durante
las últimas semanas, Yunho había tenido un dolor extraño en el pecho. Los
dolores además venían acompañados de ataques de migraña, dolor de músculos y
fiebre. Los doctores no sabían que era y debido a eso, Yunho había tenido que
ausentarse de sus actividades en el servicio militar. Ahora, recostado en la
camilla de un hospital, Yunho esperaba recuperarse lo más pronto posible puesto
que él no creía que lo que fuera que le estuviera pasando fuera algo grave.
Tal
vez solo se trataba de un intenso episodio de resfriado.
O
quizás una virosis.
Pero
nada que requiriera medidas extremas.
Aquella
noche, su hermana menor Jihye se había ofrecido a cuidarlo y ahora le mostraba una
serie de fotos que había subido a instagram. Yunho recibió el celular de su hermana
y deslizo con su índice una a una las fotos, emanando de vez en cuando una
sonrisa al ver a Jihye tan feliz en sus fotos de recién casada. Luego, sin
querer, Yunho se salió del instagram de su hermana, quedando en la misma
aplicación pero en otra página. Queriendo devolverse al álbum, Yunho espicho
otra parte de la pantalla la cual en vez de regresarlo, lo llevo a otra foto,
una foto que no creía que fuera ver.
Aquella
foto pertenecía… al instagram de Jaejoong, y en esta este estaba haciendo una
mueca a la cámara, sentado en el sillón de lo que parecía ser un Avión. Yunho
dirigió su vista al pie de la foto:
“Pasando a un ritmo rápido, me
pregunto cuánto de la estación se ha ido ya… Nos conocimos por casualidad a lo largo
de este camino”
Esa,
sin duda era una parte de una de sus viejas canciónes. Sintiéndose extrañamente
conmovido, Yunho dejo un comentario con otra parte de la canción sin percatarse
que estaba escribiendo desde la cuenta de su hermana. Luego puso un corazón en
el centro de la foto, justo donde quedaba el rostro de Jaejoong.
Una
tos muy fuerte lo ataco después, provocando que soltara el celular y se
volviera a recostar de lleno en la cama. La migraña estaba volviendo aparecer y
una opresión dura se le intensifico en el pecho. ¿Estaba pasando algo grave?
No
prestándole demasiada atención a sus repentinos síntomas, Yunho tomo esta vez su
celular y le envió un mensaje de voz a Changmin en donde le cantaba un pedazo
de la canción que Jaejoong había escrito, ya que debido al post de este, ahora
se sentía tremendamente nostálgico.
A
continuación, lo inimaginable pasó.
El
rostro de Yunho se volvió morado, su pecho comenzó a arder, su respiración a
fallar. Jihye se levanto alarmada al ver a su hermano luchar por respirar, gritando
desesperada por algo de ayuda. Las enfermeras no tardaron en llegar, pero fue
en vano.
En
menos de un minuto, Yunho cayó en la inconsciencia.
Su
pulso se detuvo.
Su
corazón dejo de latir.
..
A
las 10:00 pm de la noche, Changmin abordó un taxi con Siwon y Donghae, y se dirigió
a los dormitorios de los cuarteles centrales de la policía de Seúl. Ese día
habían estado promocionando un evento a favor de la no violencia en las
escuelas y este se había prolongado más de lo habitual.
En
cuanto Changmin se acomodó en el asiento de atrás, su celular vibro en sus
pantalones, avisándole que tenía una notificación. Sacando su teléfono de su
bolsillo trasero, Changmin no pudo evitar arrugar su entrecejo al ver que su
Hyung le había enviado un mensaje de voz. Abrió el archivo, escuchando la grave
pero a la vez melódica voz de su hyung:
“ ♪ ♫Las cosas que perduran, las cosas en
las que creo, mientras vayan cambiando hacia la felicidad, caminaremos juntos…
Nos conocimos por casualidad a lo largo de este camino ♪ ♫”
¿Por
qué su Hyung le enviaba eso ahora? Dios, a veces Yunho podía ser tan meloso.
Volviendo
a guardar el celular en su bolsillo, Changmin se quedo observando las luces de
la ciudad mientras tatareaba la canción una y otra vez. Los carros al pasar, la
gente caminando, todo parecía tan… pacifico. Parecía como si estuviera dentro
de un sueño en el que todo pasa lentamente. La melodía presente en su mente
ayudaba a mantener esa atmosfera idílica.
Embelesado
por aquella atmosfera, Changmin cerró sus ojos, sintiendo como el sueño venia lentamente
por él. Sin embargo la voz preocupada de Donghae lo devolvió a la realidad.
Este, sentado en el asiento de copiloto, hablaba con alguien en el teléfono, luciendo
terriblemente consternado. Cuando Changmin le preguntó que sucedía, Donghae le
dijo que había recibido una llamada de uno de sus superiores, diciéndole que
había ocurrido un tiroteo en los cuarteles del sur de Gyeonggi. A Changmin le
recorrió una corriente fría por su espina dorsal al escuchar ese nombre. No
hace mucho recordó haber leído que Junsu había sido asignado a ese cuartel. Changmin
esperó haber leído mal, o haber
recordado mal.
O
simplemente que Junsu estuviera bien.
Tan
metido estaba en sus preocupaciones que no se dio cuenta cuando el taxi por
pura negligencia se pasó un semáforo, y de la calle contraria un carro a toda
velocidad apareció de la nada. El taxi intentó esquivarlo pero fue en vano, los
dos carros terminaron colisionando y Changmin sintió su cuerpo rebotar al girar
el carro 360 grados por los aires.
Yunho
siempre le decía que debía usar su cinturón así no estuviera en el puesto de adelante.
Changmin siempre trataba de hacerle caso.
Pero
esta vez no había sido así.
..
Un
montón de voces gritando al unisonó.
Un
escenario iluminado.
Un
aroma familiar.
Changmin
abrió sus ojos y se sorprendió al ver que estaba encima de una tarima de
estadio, con un inmenso público a sus pies. Habrían unas cien mil personas
quizás, todas sosteniendo globos rojos de helio y lighsticks del mismo color.
El cielo oscuro estaba despejado, iluminado ocasionalmente por fuegos pirotécnicos.
Todo
esto era muy extraño, parecía como si se tratara de un sueño. ¿Qué hago aquí?, Fue la pregunta que Changmin
se hizo.
Volteando
a su lado izquierdo, Changmin observo a su hyung Yunho, el cual al igual que él
lucia muy confundido. Le preguntó con la mirada que pasaba pero Yunho estaba
tan preocupado con su propio estado, que ni siquiera le prestó atención.
Changmin dirigió entonces su mirada al otro lado.
Lo
que vio lo descoloco aun mas.
De
pie, junto a él, estaban sus otros Hyungs, aquellos que habían decidido
abandonarlo años atrás.
Su
hyung mayor, Jaejoong, restregó sus ojos al no dar crédito a lo que estos veían.
Intercalo su mirada a cada lado. Todos estaban vestidos de traje color blanco,
todos tenían aquella mirada perdida en sus ojos. ¿Qué era lo que estaba
sucediendo? Hace unos segundos estaban en lugares diferentes y ahora se encobraban
reunidos en el mismo lugar.
¿Era obra de los cielos acaso?
Yoochun
abrió su boca para preguntar qué pasaba pero nada salió de su garganta. Estaba
mudo. Vio a los demás hacer lo mismo, nadie pudo recitar palabra. Era como si
les hubieran quitado la oportunidad de expresarse. La oportunidad de saber qué
rayos estaba sucediendo.
De
repente, un esplendor ilumino el cielo y todos los fans gritaron al unisonó. La
melodía de su canción debut empezó a sonar y cada una de las personas presentes
levantaron su lightstick, balanceándolo levemente de un lado a otro mientras
comenzaban a cantar.
♪ ♫Haruman nibange chimdaega dwegosipeo oh baby
deo ddaseuhi pogeunhi
naepume, gamssa-ango jaeugosipeo ♪ ♫
Junsu
se llevo una mano a su boca al no poder contener sus emociones. Todo esto
era tan idílico. Tan irreal. Por años
cada uno había tenido el deseo oculto de volverse a reunir juntos en un
escenario, y que eso estuviera pasando justo ahora, de esta forma tan bella,
era un sentimiento indescriptible. Algo que no estaban seguros de que experimentarían
de nuevo. ¿Lo mejor?:
Era más hermoso de lo que habían imaginado.
Conmovido,
Yunho se acerco a Changmin y tomo su mano, alentándolo con su mirada que tomara
la de Jaejoong quien estaba a su lado. Changmin tomo la mano de Jaejoong y
Jaejoong tomo la mano de Yoochun. Este luego tomo la mano de Junsu. Siguiendo el ritmo de las fans, Los cinco se
balancearon lento, lado a lado, sintiéndose embelesados por la atmosfera melancólica
pero al mismo tiempo feliz del lugar. Ya no importaba porque estaban en ese
lugar, solo importaba que estaban en ese lugar, disfrutando lo que por tantos
años habían deseado. Y es que pese a su relación trágica, a las peleas, los distanciamientos
y las calumnias; el poder de su fraternidad nunca se había esfumado. Siempre
estuvo ahí presente, siempre estuvo aunque medio mundo tratara de derribarlo.
Yunho
volteo su cara y vio los rostros de sus compañeros. Ya no estaban tristes,
estaban sonriendo. Un flashback se le paso por la mente, uno de hace años en
donde todos hicieron la promesa de continuar hasta el final. Fue como si
volviera a tener veinte años, donde los sueños de todos eran uno compartido y
no había malentendidos.
Fue
como volver a estar en el paraíso, a sus mejores años de vida.
Cuando
la canción fue llegando al final, los cinco se acercaron y compartieron un
abrazo grupal, entrelazando sus brazos, acercado sus rostros, llorando las
mismas lagrimas. Siendo uno de nuevo, como siempre debió haber sido. Todo el rencor que pudieron haber sentido los
últimos años, se esfumó con ese abrazo. Era como si fuera algo reparador, una
herida que sanaba. Después de todo, el amor siempre fue más grande que el
odio.
Luego
se separaron solo unos centímetros, viéndose los rostros entre si los cuales
estaban brillantes por las lágrimas. Compartieron una risa por lo cursis que se
veían, se limpiaron unos a otros y se miraron a los ojos. Incluso y aunque no
pudieran hablar, las palabras no eran necesarias. Se conocían tan bien que cada
uno sabía lo que quería decir el otro con solo mirar su rostro. Así de fuerte
era su unión.
Hace
más de quince años, cuando recién se conocieron, nunca pensaron que todo eso
pasaría. Nunca pensaron que los vínculos más fuertes que desarrollarían en su
vida fuesen de amistad.
Porque
el amor de familia se adquiere sin proponerlo.
El
amor de una pareja es débil y se puede quebrantar con el tiempo.
Sin
embargo, el amor de amigos es ese que uno escoge, es ese que a pesar que pase el
tiempo siempre estará ahí presente.
Es
uno de los amores más sinceros que puede existir.
Regresaron
sus miradas al frente, manteniendo sus brazos encima de los hombros del otro.
Coordinados alzaron sus cabezas y notaron como en el cielo, las estrellas
adquirían un color rojo, como si fueran lightstick. Parecía como si el cielo
estuviera reflejando lo que pasaba en la tierra, como si estuviera reflejando
aquel océano rojo de luces.
A
continuación, cinco estrellas que estaban en posición de W aumentaron de tamaño
y brillaron de tal manera que opacaron a las demás que las rodeaban.
Esas
cinco estrellas eran ellos. Eran su constelación: Cassiopeia.
Totalmente
feliz, Jaejoong bajo su rostro, regresando su mirada a sus fans. Sin embargó
algo había cambiado. Los fans ya no llevaban lightstisks ni globos rojos. En su
lugar llevaban flores y sus caras que al principio se iluminaban con felicidad,
ahora estaban tapadas por velos negros.
La
sonrisa de Jaejoong desapareció.
Entonces
él comprendió.
Esto
no se trataba de un concierto, esto no era su reunión.
Esta
era su velorio. Las fans estaban reunidas para sus entierros.
Y
es que la triste realidad era que ellos no habían podido encontrarse en la vida
real, porque ya ninguno pertenecía a ese mundo.
De
repente, los cinco dejaron de sentir los brazos de los otros sobre sus hombros.
Cada uno fue encerrándose en su propia alucinación. Cuando intentaron verse entre
si, en vez de sus cuerpos habían lapidas. Lapidas sobre un escenario.
La
canción de repente dejo de sonar, las luces del estadio se apagaron una a una a
la par que las fans desaparecían con ellas. Las estrellas se hicieron cada vez más
pequeñas y luego las luces propias del escenario, las cuales estaban alumbrando
esas cinco lapidas, se apagaron una por una conforme los corazones de cada uno
dejaban de latir.
En
completa oscuridad lo único que permaneció fue la constelación Cassiopeia, la
cual seguía alumbrando como nunca.
En
completa oscuridad la W adornó el firmamento.
Aun
estaban esas estrellas, aun estaban unidas, aun seguían brillando.
Aun
seguían prevaleciendo pese a que todo se había acabado.
W
..
“En esta mañana soleada,
Corea y el mundo del Kpop se despierta con una noticia devastadora. Los dos
miembros pertenecientes a Dong Bang Shin ki, Jung Yunho y Shim Changmin, y los
tres miembros de JYJ antiguamente miembros del mismo grupo, Kim Jaejoong, Kim
Junsu y Park Yoochun, murieron anoche en hechos aparentemente no relacionados.
La policía aun está investigando si esto se trato de un múltiple homicidio o si
en realidad solo fue una triste coincidencia, lo cierto es que ya se están
empezando a organizar homenajes a través del país y toda Asia. Las fans lloran
sus partidas; sus familias y amigos aun se encuentran en el escepticismo.
Hace catorce años,
Dong bang sin ki debuto en la navidad del 2003. A mediados del 2009, tres
miembros colocaron una demanda contra su compañía y el grupo tomo caminos
diferentes. Anoche, al parecer, esos caminos se volvieron a encontrar.
Quizás todos ellos
hayan llegado al mundo en distintas fechas pero ahora ellos lo están dejando al
mismo tiempo. Como si su pacto de unión hubiera trascendido incluso las leyes
de la vida”.
Fin
..
Nota: Ok, como se podrán dar cuenta esto no es un fic Yunjae, es un fic OT5. Y un fic muy triste en realidad, pero asi lo queria escribir, tragico y hermoso a la vez. La verdad, quise escribir esta historia como una forma de exteriorizar la tristeza que me da al pensar en la historia de DBSK, en la ruptura de su relación. Realmente quería escribir un fic sobre su union y su amistad, pero de manera trágica, triste, porque así es como siento que es en la vida real.
Quizás mas adelante escriba otro fic OT5 pero feliz.
Una cosa que quiero aclarar es que sus almas no se reencuentran cuando cada uno muere. Lo que pasa es que ellos tienen una alucinación compartida, un recuerdo compartido de este mundo, y ya que su relación y DBSK significo tanto para ellos, pues por eso en sus últimos segundos de morir todos alucinan lo mismo. Así se ve reflejado el poder de su unión.
Espero que les haya tocado el corazón este fic, y que hayan podido sentirlo, ese era muy propósito. Obviamente no me gustaría que nada de esto pasara en el futuro (bueno solo el concierto jejejeje), esto es ficción.
Nos vemos en otra actu y bueno, que las cosas sean brillantes como cassiopeia en el futuro.