Fantasía
sexual (One shot)
Yunho supo que nada bueno podía
provenir de que ellos se emborracharan un viernes por la noche en un sauna. Y
por ellos se refería a nada más y
nada menos que a Jaejoong y Yoochun, quienes estaban compartiendo bebidas,
historias y risas en el onsen puesto
exclusivamente en su habitación de hotel en Japón. No los podía culpar, la
semana había sido extremadamente agitada entre presentaciones, entrevistas y
demás actividades relacionadas con sus promociones en Japón; por lo que una
buena sesión de relajación y entretenimiento era altamente razonable.
Los menores del grupo, Changmin y
Junsu, se habían ido a dormir temprano alegando que esta era la única
oportunidad que habían tenido en días para descansar temprano. El líder los
había acompañado, queriendo también recibir una buena dosis de sueño, pero las
risas y murmullos atolondrados procedentes de la tina onsen no lo dejaron pegar un ojo.
—¿Así que te cogiste a esa chica en
el camerino de Music Bank? —Jaejoong le preguntó a Yoochun en un tono de voz
anormalmente alto.
“Oh” Yunho rodó los ojos, ahí
estaban de nuevo esos dos… hablando de sexo. Era normal al fin al cabo. Como
hombres adultos era bastante común abarcar esos temas, sobre todo para alguien tan
alocados como sus dos compañeros de grupo.
Yoochun movió la cabeza en
afirmación y luego se echó a reír, recordando
su travesura. —Ella era una de las bailarinas de la compañía, así que
fue fácil encerrarme con ella en un cuarto y hacerlo rápido.
—Vaya nunca lo hubiera esperado,
contando con el hecho de que casi ni tenemos tiempo de estar a solas en esos
eventos. —Jaejoong murmuró.
—Lo sé, pero ella me gustaba y era
esa clase de fantasía que quería probar. No sabes la adrenalina que se siente
estar a punto de ser descubierto.
—¿Ustedes siguen aquí? —Yunho
interrumpió de repente, apareciendo por la puerta corrediza que comunicaba las
habitaciones con el onsen.
—Yunho creí que ya estabas en tu
séptimo sueño. —Jaejoong dijo mientras veía al otro acercarse.
—Seria así si ustedes dos no me
hubieran impedido el sueño con sus risas y su conversación. —Yunho respondió a
modo de acusación.
—Entonces ven aquí Yunho, hace
tiempo que no compartimos un tiempo de calidad como este. —Yoochun palmeó el
lugar a su lado, invitando a Yunho a meterse y sentarse junto a ellos.
Sabiendo que si regresaba a la cama
esos dos no le dejarían conciliar el sueño, Yunho se quitó su ropa de dormir y
entro rápidamente al Onsen, acomodándose junto a Jaejoong y recibiendo un vaso
de sake de Yoochun para entrar en ambiente. Dormir era necesario pero compartir
un rato de relajación con sus amigos, también era un plan muy agradable.
—Entonces Jaejoong, —Yoochun
continuo cuando por fin Yunho se acomodó en su lugar. —Yo ya te he dicho la
mía, así que: ¿Cuál es tu fantasía sexual? —Preguntó sin vergüenza, provocando
que Jaejoong casi escupiera el sorbo de sake que tenía en la boca.
—¿Qué? ¿Por qué de repente me
preguntas eso?
—Hemos estado hablando de locuras
sexuales y de las cosas que habíamos hecho y que queríamos probar. Yo ya
compartí mi experiencia, ahora quiero saber la tuya.
Ante eso, Yunho miró a Jaejoong,
queriendo examinar su expresión. El mayor lucía un poco intimidado por la
pregunta, como si se sintiera fuera de lugar. Yunho se preguntó si esa actitud
se debía a su presencia, ya que Jaejoong siempre parecía un poco más cohibido
al tratar esos temas cuando él estaba presente.
—Bueno… —Jaejoong habló luego de un
rato, no muy decidido. —He pensado alguna vez en algo, pero es una locura.
—Esta es la noche de decir locuras.
—Le animó Yoochun.
Jaejoong le dio una rápida mirada a
Yunho y este sintió como si Jae buscara su aprobación a lo siguiente que diría:
—Mi fantasía sexual es hacerlo con un hombre. —Finalmente confesó, provocando
que ambos, Yoochun y Yunho abrieran los ojos en exceso.
Yoochun soltó una carcajada después.
—Vaya, no sabía que te gustaran los hombres Jaejoongie. De lo que uno se entera
poniéndose a tomar con los amigos…
—No me gustan los hombres, solo es
algo que quiero probar.
—¿Cómo experimentar?
—Si algo así.
Jaejoong respondió tajante sin
querer levantar su mirada del agua. Era obvio que sentía vergüenza el tener que
compartir aquella idea privada que hacia un tiempo le tenía rondando en la
cabeza, y que Yunho estuviera ahí, en silencio escuchando todo, hacía mucho peor
la experiencia. Hablar de ese tipo de cosas con Yoochun era una cosa, pero
hacerlo con Yunho era otra cosa totalmente distinta. Se sentía extraño, sentía
que no era conveniente tener ese tipo de conversación en presencia de su líder.
—¿Así que entonces… —Yoochun siguió
después de un rato, decidido a molestar a Jaejoong por el resto de la noche. —
¿…Te sientes mejor haciéndolo con un hombre que con una mujer?
La pregunta atrapó con la baja
guardia a Jaejoong, volteándose para ver los ojos traviesos de Yoochun. Luego
chasqueó con la lengua, negándole a Yoochun ya que ni siquiera lo había hecho
con un hombre.
—¿Pero si se presentara la
oportunidad… lo harías?
—No lo sé.
—¡Ehh, No me mientas Jaejoong!
¡Sabes que sí! Te conozco lo suficiente para saber que si lo harías.
—Para que preguntas entonces.
—Pues porque quiero rectificar,
además…
Yunho observó la pelea entre
Jaejoong y Yoochun mientras su mente solo se enfocaba en repetir la confesión
que el mayor había hecho. “¿Jaejoong
quiere estar con un hombre?” Se preguntó en su cabeza, no dando crédito a
lo que sus oídos habían acabado de escuchar. Sabía que Jaejoong era alguien que
disfrutaba la compañía masculina, que muchas veces incluso confundían con una
chica gracias a su apariencia y su inusual comportamiento 4D, pero de ahí a
pensar que Jaejoong quería experimentar tener sexo con un hombre; vaya, jamás
lo habría imaginado. Tan solo el pensamiento lo hacía sentirse increíblemente
incómodo.
—¿Y tú Yunho, tu qué piensas de todo
esto? ¿Crees que Jaejoong sería el de abajo o el de arriba?
Yoochun le preguntó divertido y
Yunho se quedó estático, sintiéndose un momento absorto de la conversación.
—Ya basta Yoochun, no lo metas en
esto.
—Oye, yo solo quiero que Yunho se
integre a la conversación. Entonces Yunho, ¿Crees que a Jaejoong le gustaría
que le den o él dar? Yo apostaría a que preferiría la segunda opción.
Yoochun hizo una mueca de dolor
cuando Jaejoong le dio un golpe en la cabeza y luego este se dirigió a Yunho,
haciéndole un gesto con la mano que parecía indicar que era aconsejable no
prestarle mucha atención a Yoochun.
—¡Ay eso dolió!
—¡Entonces deja de hacer ese tipo de
bromitas!
—Estaba hablando con Yunho, no
contigo.
—¡Pero estabas hablando de mí!
De nuevo, Yunho no hizo nada más que
observar como Yoochun y Jaejoong discutían, echándose agua como si fueran dos adolescentes
malcriados. “Maldita hora en que se me
ocurrió dejar mis preciadas horas de sueño, para venir aquí a escuchar a estos
dos hablar de sexo” Yunho viró los ojos, deseando estar en cualquier otro
lugar que en ese. Ya era suficiente tener que escuchar a Jaejoong hablar sobre
sus deseos sexuales, como para que ahora Yoochun quisiera incluirlo penosamente
en la charla.
—¡Esta bien, está bien, si tuviera
la oportunidad con gusto lo haría!, ¡¿Contento?!
El grito de Jaejoong lo trajo de
nuevo al mundo real.
—Así que si estás de acuerdo. —Las
orbes de Yoochun de pronto se volvieron más profundas, su sentido provocador
volviendo a activarse. — ¿Con quién?
—¿Con quién qué?
—¿Con quién lo harías?
—¿Con quién lo haría de qué?
—¡¿Con cuál carajos hombre lo
harías?! —Yoochun exclamó exasperado. — ¿Con cuál hombre tendrías sexo?
Yunho vio eso como una señal en
verde para irse. —Bueno chicos, fue un placer estar aquí con ustedes pero yo
creo que me voy a… —No alcanzó a completar su escape porque Yoochun lo empujó
de nuevo en su puesto.
—No te lo voy a decir. Ni siquiera
lo he pensado.
—¿Con cuál de nosotros cuatro?
—Yoochun se rió. —Para ponértelo más fácil.
—Con ninguno. —Jaejoong respondió
cortante pero aun así Yoochun no iba a parar de insistir.
—¿Con cuál de nosotros dos entonces?
¿Yunho o yo? —Yoochun dijo y Jaejoong lo miro molesto, observando cómo las
comisuras de los labios de Yoochun se iban volviendo más marcadas. Jaejoong
conocía esa vieja artimaña de Yoochun de querer emparejarlo a la fuerza con
Yunho (Por todo eso de su fanservice Yunjae
y demás); esta vez no quería darle el gusto de poder burlarse de ellos.
No quería darle la satisfacción de
ponerlo en aprietos. —¿Acaso te me estas confesando?
—No, pero debo admitir que también
me gustaría experimentar eso. Aunque contigo…creo que sería demasiado raro para
los dos.
Jaejoong asintió con la cabeza.
—Estoy de acuerdo.
—¿Y Yunho?
Ambos dirigieron su mirada al líder,
acorralándolo con la vista. Si la tierra pudiera abrirse y tragarlo en ese momento,
Yunho lo aceptaría sin restricciones.
—Oh vamos, no metas a Yunho-Shii en
esto. Ya sabemos la respuesta. —Jaejoong
intentó bromear con ansias de aligerar el pesado ambiente que se había formado.
—¿Pero si te gustaría? —Yoochun
empujó más.
—¿Porqué hablan de mi como si no
estuviera aquí? —Yunho dijo entre risas, tratando de que la conversación
muriera en ese punto. No estaba seguro si quería saber si Jaejoong quería tener
sexo con él, aunque una parte de él, tenía curiosidad por saberlo.
—Es porque has estado mudo toda la
noche. —Respondió Yoochun. —Pero cambiando de tema, aunque Jaejoong lo
quisiera, no creo que tú aceptarías tener sexo con él, eres siempre tan
correcto.
—Bueno en eso tienes razón… —Yunho
concordó con sus palabras. De solo hablar de eso lo hacía sentirse incómodo,
¿Qué pasaría si realmente estuviera dispuesto a hacerlo? ¡Con un hombre, con su
amigo! Era impensable y algo que jamás se le habría pasado por la cabeza.
Comportarse afectuoso con los hombres era una cosa, ¿Pero de ahí a atreverse a
más? Su razón y sus principios no se lo permitirían.
—Sí, debes aceptar que eres un poco
mojigato. —Jaejoong mencionó en un tono afectuoso, provocando una risa por
parte de Yoochun.
“¿Un
mojigato?”
Pensó Yunho. —Bueno, tampoco soy tan puritano en esas cuestiones, solo que…
—Te daría miedo, no eres como yo, no
estarías dispuesto a atreverte. Es algo aburrido si lo piensas, pensar de esa
manera… tan cuadriculada…
—¡Oye tampoco soy tan aburrido!
Tengo mi moral que es otra cosa…
—¿Entonces Jaejoong, crees que Yunho
es aburrido en el sexo? —Yoochun lo interrumpió con su pregunta dirigida a
Jaejoong a manera de broma.
—¡Oh no, no quise decir eso! —Jaejoong
se excusó, mirando con cautela a Yunho. —Solo que yo sé que no está abierto a
ese tipo de cosas, de fetiches o fantasías sexuales…
—Si lo sé, como hacer un trió. —Añadió Yoochun.
—O hacerlo en público, en un baño
por ejemplo. ¿No es así, Yunho shii? —Jaejoong le preguntó y Yunho pensó en qué
momento su vida sexual se había convertido en un chiste o en un tema de dominio
público. —Yunho quedaría satisfecho con una mujer linda, una buena cama y ya.
Algo tedioso de hacer todas las veces si me preguntas… Pero así es al fin y al
cabo…
—Exacto. —Concordó Yoochun.
“¿Y Qué saben
ellos de mi vida sexual? Como si ellos se la pasaran cogiendo todo el día.
Además yo estaría dispuesto a hacer unas cuantas cosas de vez en cuando, solo
que no hablo tan libremente de eso”. El moreno se sintió tan ofendido que ya ni ganas le
quedaron de defenderse.
—Entonces Yunho queda descartado.
—Yoochun declaró un rato después de terminar toda la burla hacia su compañero
de grupo. —¿Con quién lo harías entonces? —Continúo con su interrogatorio a
Jaejoong.
Jaejoong se quedó callado, jugando
un rato con el borde del vaso en su mano. —Un amigo japonés me lo propuso un
día. —Confesó en un leve suspiro, como si no quisiera revelar toda la verdad.
“¿Cómo?”
—¿Quién? —Yoochun preguntó ansioso.
Jaejoong le dio una rápida mirada a
los dos y se sonrojó, debatiéndose si debía decir o no lo que tenía en su
cabeza. Pero que carajos, que importaba ya, ya había revelado demasiado, y se
encontraba lo suficientemente prendido por el alcohol para no ponerle filtro a
su voz. —No se los diré pero… ¿Puedo confesarles algo?
Yunho tuvo un mal presentimiento.
—¿Qué es?
—Hace como dos meses, una noche fui
a tomar al apartamento de ese amigo. Y bueno, con el alcohol y todo… nosotros…
—Jaejoong se detuvo un momento y observó la intensa mirada de Yunho sobre él.
Decidió entonces guardárselo para sí mismo. —No, nada, no es nada.
—Oh vamos, —Yoochun le dio una
palmada. —¿Qué es?
—No es nada. Es mejor que no lo
sepan.
Yunho endureció sus facciones.
—¿Acaso se las chuparon o algo?
—Preguntó Yoochun entre risas.
Jaejoong bajo su rostro y emanó una
sonrisa incomoda, revelando que precisamente eso era lo que ocultaba. De
inmediato Yoochun soltó un chillido y Yunho se mordió el labio inferior,
tremendamente molesto por la confesión. ¿Quién era ese amigo de Jaejoong que se
había atrevido a hacerle eso? Ahora ya sabía porque no le gustaba que Jaejoong
se reuniera con sus amigos japoneses. Un sentimiento de sobreprotección se le
instaló en el corazón. Otro sentimiento también lo ataco, aunque él quiso
evitarlo: Se estaba poniendo celoso.
—Oh, se acabó el sake. —Yoochun dijo
de la nada al tomar la botella vacía. —Voy por más ¿Ok?
—Ok. —Yunho y Jaejoong respondieron
al unísono y se miraron al instante, compartiendo una mirada intensa de esas
que solo ellos podían compartir.
Bueno, al parecer esta noche seria
larga.
..
Hacia media hora que los chicos
habían salido del onsen y se habían
ido cada uno a su respectiva cama. Yoochun
había elegido la cama libre de la habitación donde se encontraban sus
dongsaengs, por lo que a Yunho y Jaejoong no les quedo de otra que compartir la
cama doble ubicada en la habitación contigua.
Quitándose la bata de baño, Yunho se
sentó en un extremo de la cama y Jaejoong se ubicó al lado contrario, alisando
las cobijas para meterse a dormir. Habían dejado la confesión sexual de
Jaejoong atrás, aun así Yunho no podía sacarse las palabras de la cabeza. Le
inquietaba profundamente, no podía creer que Jaejoong se hubiera prestado para
esa clase de actos. No es que Yunho fuera un tipo homofóbico, él estaba
perfectamente de acuerdo con lo que la gente quisiera hacer con su sexualidad y
su cuerpo, sin embargo el hecho de que Jaejoongie hubiera sido el que…
—Jaejoongie. —Yunho lo llamó cuando
sus pensamientos se hicieron tan insoportables para seguir aguantándolos en
silencio. Necesita saber toda la historia, necesitaba asegurarse que solo había
sido una cosa de una sola noche y que no volvería a pasar. —¿Enserio hiciste
sexo oral con un amigo en Japón?
Ante la pregunta, las mejillas de
Jaejoong se tornaron de un fuerte color rojizo, ocultando su cara. —Solo fue
una vez Yunho. No ha vuelto a pasar.
—¿Y te gusto?
—Yo… —Jaejoong paso saliva. —Sentí
un poco de asco la verdad. Fue placentero pero tal vez me pareció así porque
estábamos borrachos.
Yunho asintió, ahora sintiéndose más
aliviado.
—Lo siento.
Fue lo que escuchó después de los
labios de Jaejoong. Yunho arrugó la cara. —¿Eh? ¿Por qué
lo sientes?
—No lo sé, siento que te decepciona
saber eso.
—Jaejoong yo soy tu líder, pero no
puedo decirte que hacer con tu cuerpo. —Yunho guardo un segundo de silencio.
—Sin embargo… si te soy sincero, no es que me guste escuchar que hagas eso con
tus amigos. Bueno, son tus amigos pero… —No hallaba las palabras correctas para
expresarse. Quería decirle a Jaejoong que el asunto le molestaba, pero no
estaba seguro si era apto para decirle lo que era bueno o no. Después de todo, Jaejoong
era un adulto, suficientemente capaz de decidir qué hacer con su vida.
—No creo que se vuelva a repetir.
—Jaejoong dijo al meterse entre las cobijas y acurrucarse en ellas. —Como te
dije fue placentero, pero no lo suficiente como para repetirlo.
—Pero dijiste que querías tener sexo
con un hombre y que incluso tu amigo te lo había propuesto, ¿Si se diera la
oportunidad lo harías con él así solo fuera por curiosidad?
Jaejoong se quedo en silencio. No
entendía porque Yunho seguía insistiendo con lo mismo ¿Realmente le interesaba
con quien se acostara? —Si estoy demasiado borracho, quizás. Quiero decir muy,
muy borracho… como para no acordarme. Él no es muy apuesto que digamos y si
decido alguna vez hacerlo con un hombre, él me debe parecer atractivo. Y ese no
es el caso de mi amigo.
—Bien. —Yunho sonrió lánguidamente.
—Me alegra saber eso.
—¿Por qué?
—Bueno es que imaginándote tener
sexo con otro hombre es una imagen que no me gusta. Me causa…
—¿Repulsión?
—Tal vez, pero es algo más... —Yunho
se acercó a Jaejoong viendo como este abría los ojos como platos por su
cercanía. —Creo que me molesta pensar que un hombre te toque. —Le confesó, no
ocultando nada en su mente. Si quería que Jaejoong fuera sincero, él también
debía mostrarle sinceridad. —Imaginar a un hombre recibiendo placer de ti es
algo que no podría tolerar. Que tengas sexo con una mujer es algo normal,
supongo, pero con un hombre… no lo sé. Siento que se aprovecharían de ti.
Jaejoong evocó una media sonrisa
ante la confesión de Yunho ¿Podría estar hablando de celos acaso? —Entonces no
te gustaría que cumpliera mi fantasía de acostarme con un hombre.
—Absolutamente no.
—Uhm. —Jaejoong se mordió los
labios. —¿Y si fuera con alguien que conoces?
—Con nadie Jaejoongie.
—¿Ni contigo?
La pregunta descolocó a Yunho. Se
quedo unos segundos en silencio al no saber que responder, y Jaejoong se dio
cuenta de la incomodidad que le había provocado, así que en seguida se
retractó, haciendo como si solo le hubiera jugado una broma. —No lo tomes en
serio Yunho-ah, ya sé que tus principios no te lo permitirían. No serias capaz
de hacer algo así.
—¿Quién dice que no lo haría? —Yunho
inesperadamente refutó.
—Bueno… siempre has sido tan
correcto, realmente me sorprendería si te atrevieras a hacer una locura como
esa. Acostarte con un hombre, o acostarte conmigo…
—Yo estaría dispuesto. —Yunho dijo
sin pensar. Verdaderamente quería demostrar que no era un hombre aburrido en
cuestiones sexuales, que si se lo proponía podía ser bastante aventado. Les
callaría la boca a Yoochun y Jaejoong, sin embargo… ¿Estaba cayendo en cuenta
de la magnitud de sus palabras?
¿Estaba cayendo en cuenta que lo que
estaba diciendo era como si le propusiera a Jaejoong tener sexo con él?
Ante la aparente determinación de
Yunho, Jaejoong se sentó en la cama, mirando de reojo la puerta corrediza de la
habitación que conectaba con el dormitorio de sus dongsaengs. En realidad no
sabía porque Yunho estaba diciendo tales cosas, pero teniéndolo a su
disposición y con las ganas presentes en su cuerpo ¿Por qué no intentarlo? A
decir verdad, Yunho era un hombre apuesto y fuerte, con el que tenia química
sin tener que forzarla. No pensaba que hacer algo como lo que tenía en mente
fuera a arruinar su amistad, tan solo sería un excitante episodio en su
historia que quedaría como una anécdota y nada más. Eso era lo que se trataba
de convencer. —Yunho, —Le susurró con precaución, acercando su rostro. —No sé
si te entiendo pero… ¿Qué estás dispuesto a hacer? ¿Qué es lo que quieres?
Yunho encaró a Jaejoong, tomándose
el tiempo para responder. Jaejoong se veía especialmente hermoso esa noche; su
cabello aun seguía mojado y su rostro estaba tan brillante que sus labios resplandecían
de forma seductora. Uhh, esos labios, el solo pensamiento de que Jaejoong
hubiera chupado el miembro de un hombre con esa boca hizo sentir tremendamente
celoso a Yunho. —Yo quiero que tu… que tu…
Y tan rápido como se decidió, tan
rápido se echo para atrás. Al parecer parte de su yo correcto lo estaba reteniendo de cometer esa locura.
Al no escuchar palabra y reconocer
indecisión en el rostro de Yunho, Jaejoong supo que este no estaba convencido,
así que decidió parar ahí, no continuar mas porque era obvio que no los
llevaría a ningún lado. Se giró entonces para apagar la luz de la lámpara y
enterrarse de nuevo entre las cobijas. —Es tarde, mañana tenemos grabación. —Dijo al cerrar los ojos. ¿En
que estaba pensando? Era obvio que el inocentón de Yunho no se atrevería a
tener sexo con él. ¿Por qué creyó que Yunho se lo estaba proponiendo?
¿Por qué creyó que sería capaz?
Frustración invadió el cuerpo de
Yunho al ver que Jaejoong había decidido terminar con la conversación. Él no
quería darla por terminado, él todavía seguía con la duda. Y es que cada vez
que pensaba en la confesión de Jaejoong y en sus burlas con Yoochun, mas
convencido estaba en atreverse a hacerlo. Ellos tenían razón; él era muy
precavido, muy cuadriculado, le faltaba sazón a su vida, ¿Qué malo sería si por
una vez obedecía a sus impulsos y no a su cabeza?
Su relación con Jaejoong no
cambiaria ¿O sí?
Prendiendo de nuevo la luz de la
lámpara, Yunho se aproximó a Jaejoong y le depositó un beso en la nuca,
haciendo que este abriera los ojos. —¿Eh? —Jaejoong preguntó al notar que la cara de Yunho estaba
muy cerca de la suya.
—Quiero que me hagas lo que le
hiciste a tu amigo. —Dijo aunque se muriera de vergüenza. Su corazón comenzó a
latir muy rápido también.
La petición tomó por sorpresa a
Jaejoong. —¿Yunho estas escuchando lo que dices? —Inquirió solo para estar
seguro. Esto de verdad era extraño.
—Sí.
Aun confundido, Jaejoong irguió su
torso y se le quedo mirando, percibiendo un brillo inusual en sus ojos. Luego
tomó el borde de la cobija y la levantó para dejar al descubierto aquel pene
flácido que reposaba entre las piernas de Yunho. No pudo evitar relamer sus
labios ante la vista. —Solo lo he hecho una vez, así que no sé muy bien…
—No importa, solo hazlo. —Yunho respondió
con rapidez. Al diablo sus principios, al diablo sus miedos, esta noche seria
otra persona. Otro lado de si mismo que no conocía y estaba ansioso por descubrir.
Pero Jaejoong todavía no estaba
seguro. Despojándose de las cobijas, se sentó frente a Yunho, apoyando sus
glúteos sobre sus talones. Después miró hacia abajo, recorriendo con sus ojos
el cuerpo desnudo de su amigo. Su lujuria comenzó a crecer al imaginar lo que
sería hacerle una mamada a su compañero de grupo. Yunho era diferente a su
amigo, Yunho era especial, su camarada de vida, casi un hermano, ¿Enserio
estaban consientes de lo que iban a hacer? —No lo entiendo Yunho ¿Por
qué quieres hacer esto? Que yo sepa tu nunca has tenido intenciones de estar
con un hombre, y que ahora estés dispuesto… no lo sé, se me hace muy extraño.
—Tal vez quiero salirme de mi
zona de confort. —Respondió.
—Tal
vez quiero intentar algo que yo sé no lo podría hacer con otra persona. Tu
dijiste que querías estar con un hombre y si estas con alguien más… Jaejoongie,
no quiero que nadie te lastime, es mejor que lo hagas conmigo.
Las mejillas de Jaejoong enrojecieron
al escuchar aquellas palabras de protección de Yunho hacia él. Le gustaba, no,
le encantaba cuando Yunho se comportaba así. Le hacía sentirse importante. —¿Te molesto también que le
hubiera hecho una mamada a mi amigo, no es así?
—Sí, mucho.
Riendo, Jaejoong rodeó con su mano
el pene de Yunho, dispuesto a mostrarle que no tenía de qué preocuparse, porque
lo iba a complacer igual o incluso mejor de lo que lo había hecho con su amigo.
Se acomodó mejor entre sus piernas y Yunho también lo hizo, colocando ambas
manos sobre el colchón para apoyarse. Comenzó entonces con unos breves tanteos,
palpando el pene de Yunho el cual ya estaba medio duro. Yunho jadeó al sentir
las manos cálidas sobre su extensión; su raciocinio le gritaba que no siguiera
adelante…
…Pero su libido lo impulsaba a más.
—¿Te la han chupado alguna
vez? —Fue
lo que preguntó Jaejoong al bombear su pene.
Yunho se aclaro la garganta. —No. —Confesó.
Esa respuesta no le pareció
inesperada a Jaejoong. —Ok,
entonces solo disfruta. —Afianzando
su mano en la base, Jaejoong se agachó y comenzó con unas fugaces lamidas,
lubricando el miembro para facilitar la chupada. Yunho de inmediato se tensó
ante el toque.
—Tranquilo. —Jaejoong se volvió a reír al
notar lo tenso que lo había puesto. —No te comeré ~ —Con sus ojos llenos de
lujuria, Jaejoong regresó al pene y lo succionó de forma leve, tan despacio que
hizo a Yunho cerrar los ojos y gemir con placidez. La mente de Yunho se
concentró entonces en los sonidos, en las caricias y en las chupadas. Sus
pensamientos con respecto a lo incorrecto de la situación fueron quedando
olvidados; el hecho de que Jaejoong era su amigo hombre también lo dejó en un
segundo plano. Por ahora solo disfrutaría sin restricciones.
Sus manos, que habían estado en los
costados, se trasladaron rápidamente a la cabeza de Jaejoong; acariciando,
atesorando y de vez en cuando guiando el ritmo de la mamada. Definitivamente
esto era algo que no había experimentado jamás y quería grabárselo por siempre
en la memoria.
Jaejoong quería ser suave, quería
ser suave para que Yunho se acordara siempre de la sensación de sus labios
rozar la piel sensible de su miembro. No es que chupar un pene le resultara
irresistible, es que Yunho era diferente. Una sensación de lujuria, de pecado y
porque no, de amor, se localizó en su interior al caer en cuenta lo que le
estaba haciendo a su amigo del alma. De verdad le estaba gustando y no entendía
porque la primera vez le había resultado algo asqueroso, si esta vez no tenía
la misma percepción. Quizá el pene de Yunho sabia mejor, quizá era eso.
Dejando la suavidad a un lado,
Jaejoong fue un poco más tosco y dio pequeñas mordiditas tanto en el pene como
en los testículos de Yunho. Luego hizo una succión fuerte en la punta para
metérselo de lleno en la boca. No era experto por lo que no tuvo suficiente
habilidad para manejarlo.
—¡Uhm! —Yunho protestó al sentir
como Jaejoong rozó con sus dientes la membrana exterior de su pene.
Jaejoong de inmediato se lo sacó de
la boca. —¿Te
lastime? —Preguntó
con preocupación.
—No. —Sonrió. —Solo hazlo con cuidado,
¿Vale?
Asintiendo, Jaejoong regresó a su
labor, esta vez más cuidadoso, procurando moverse lento para no tener ningún
accidente. Chupaba, se alejaba para recuperar aliento y luego se lo volvía a
meter. De vez en cuando enviaba miradas hacia arriba para captar la expresión
de Yunho al verlo con su pene dentro de la boca, pero este estaba tan
concentrado en su propio placer, que no se daba cuenta de la mirada juguetona
que le quería dedicar Jaejoong.
Jaejoong mamó algunos minutos más y
cuando sintió como la respiración de Yunho comenzó a aumentar, se alejó antes
de que el semen saliera disparado ensuciando las sabanas de la cama. Después
ambos se quedaron en silencio: Yunho agitado recuperándose de su orgasmo y
Jaejoong viéndolo con una sonrisa dibujada en el rostro. Tenían las mejillas
enrojecidas y el rostro caliente.
En
realidad había sido una locura.
—Tuviste mas aguante. —Jaejoong le dijo
rato después mientras le pasaba un mechón por detrás de la oreja. —Mi amigo no duro
mucho.
—Es que lo haces bien. —Yunho comentó sin atreverse
a mirarlo a los ojos.
Jaejoong se lamió el labio,
complacido. Acortando la distancia, él colocó ambas manos en los hombros de
Yunho, aferrándose. —Y
tú sabes muy bien. —Esto
se lo susurró cerca de la oreja, acariciando con su aliento el cartílago de la
curvatura. Yunho envolvió en un abrazo a Jaejoong y le acarició la espalda,
pensando en cómo pasar ahora a la siguiente fase. Pese a haber iniciado, aun se
sentía muy nervioso y con algo de culpabilidad. No negaba que le había gustado,
sin embargo el pensamiento de que no
debió haber pasado lo seguía atormentando.
Jaejoong notó ese miedo y ubicó su
cara enfrente de la cara de Yunho, tan cerca que la punta de sus narices se tocaron.
Yunho lo miró con detenimiento; en verdad Jaejoong era hermoso. —Después de que
hicieron sexo oral… ¿Paso algo más? —Preguntó no pudiéndose sacar de la cabeza
aquella desagradable confesión. Ahora que lo había experimentado, le daba más
cólera saber que otro había pasado por lo mismo.
—No Yunho. —Jaejoong respondió tajante. —Él se durmió y yo también lo
hice. En la mañana hablamos sobre lo que había sucedido, pero solo se quedo
como un episodio sin trascendencia. ¿Qué es lo que pasa, aun sigues perturbado
por eso? ¿Por qué tanta curiosidad?
—No puedo creer que después
de una mamada las cosas no hayan pasado a más. Mas cuando tu…
—¿Mas cuando yo…?
—Más cuando tú eres tan…
irresistible.
Ante eso, la boca de Jaejoong se
abrió sutilmente; sus ojos brillaron como esferas. Dentro de sí, él sabía que
Yunho no lo miraba con los mismos ojos que miraba a sus dongsaengs. No es que
creyera que le gustara, es que Yunho lo trataba diferente, con más cariño
quizá, con delicadeza, como si se tratara de una chica. Tal vez por eso muchos
estaban obsesionados con su pareja Yunjae,
por la manera en la que Yunho lo veía. Porque lo que no se podía decir, se podia
sentir.
Y él sentía, muy dentro de sí, que
una parte de Yunho lo deseaba. Así Yunho fuera un hombre (supuestamente)
heterosexual. —¿Y
tú qué piensas hacer? —Lo
retó a expresar sus deseos. Él quería escucharlos.
Pero Yunho se mantuvo en silencio.
Jaejoong entonces decidió dar el
primer paso. —Seré
el de abajo, si así te sientes más cómodo.
—Yo…
Yunho no alcanzó a completar su
frase porque Jaejoong le plantó un beso dulce en los labios, alejándose después
para ver su reacción. Yunho gimió cuando Jaejoong de nuevo se acerco y le dio
otro beso pequeño, y lo hizo una vez más cuando le dio otro más. Después,
inesperadamente Jaejoong se desligó de su abrazo y se acostó de costado en su
lado de la cama, mirando en dirección a la lámpara de noche. Yunho no dudo en
ubicarse a su lado, moldeando su cuerpo desnudo contra el otro cuerpo. Paso uno
de sus brazos por encima del torso de Jaejoong y el otro por debajo de su
cuello. Luego le dio un pequeño beso en el hombro, consintiéndolo.
—Jaejoongie ~ —Le dijo en un tono
dulce, sonando como un niño. Jaejoong no pudo evitar sonreír; le gustaba cuando
Yunho utilizaba su aegyo. Giró su
cara y se encontró con la mejilla de Yunho que estaba descansada sobre su
rostro, le dio un beso y cuando le iba a dar otro, Yunho giró su rostro y sus
bocas se encontraron abiertas una contra la otra. Empezó un beso pacífico,
baboso, acariciándose los labios mientras sus lenguas se enredaban sin premura.
La mano de Yunho debajo del cuello de Jaejoong tomó el mentón de este y lo
acarició esparciendo su pulgar por la suave piel.
Jamás se habían besado así, a lo
mucho que habían llegado era a besos pequeños; nunca se imaginaron estar
compartiendo un beso tan sexual como ese. Totalmente excitado, Jaejoong tomó la
mano de Yunho que estaba sobre su pecho y la dirigió hacia su entrepierna para
que masturbara su pene despierto. Al tocarlo Yunho se cohibió un poco, pero luego se relajó, tomando con su mano el
pene y batiéndolo despacio pero con ritmo.
Esta era la primera vez que tocaba el pene de otro hombre.
—Yunho… —Jaejoong suspiró ahogado
cuando por fin se separaron del caliente beso. Sus ojos estaban aun cerrados. —Quiero
que me folles. —Dijo
sin timidez.
El rostro de Yunho ardió ante la
suplica. —No
quiero lastimarte. —Susurró,
era obvio que la penetración no iba a ser tan fácil como con una mujer.
—No importa, tengo algo.
Erguiéndose por un momento, Jaejoong
estiró su mano para abrir el cajón de la mesita de noche y sacar de el una
especie de lubricante en una botella. Luego vertió el ungüento en la yema de
sus dedos, esparciéndolo en los anillos de su ano y en la extensión del pene de
Yunho para no tener complicaciones. El moreno solo lo miraba, pasando saliva al
poder presentir la sensación de lo que sería estar dentro de su cuerpo. Dejando
la botella de nuevo en la mesa, Jaejoong volvió a su posición: De espaldas a Yunho,
entre sus brazos.
Estando ahora lo suficientemente
lubricados, Yunho ubicó su palpitante pene en la entrada y se quedo unos
segundos quieto. De nuevo beso a Jaejoong. —¿Estás seguro de esto? —Le preguntó
con cariño. Más que deseo, él sentía mucho afecto por Jaejoong.
Jaejoong soltó una risita. —No. —Admitió.
—Pero es excitante y quiero probarlo.
—¿Nuestra relación seguirá igual?
—Claro que si Yunho. ¿Qué pasa? ¿Te estás arrepintiendo?
—No es eso, es que es algo muy loco.
Jaejoong le guiñó un ojo. —Sera nuestra locura ¿Bueno?
Nuestro secreto.
Asintiendo, Yunho decidió no objetar
más y proseguir con lo que habían empezado. Ya no había marcha atrás. Con delicadeza, introdujo el glande
de su pene en el ano de Jaejoong. El chico de inmediato se sacudió inquieto,
soltando leves quejidos por lo extraño y doloroso que se estaba sintiendo. El
pene de Yunho no era escuálido, en realidad era de un muy buen tamaño, por lo
que era difícil tratar de expandirse. Yunho respiró frustrado al no poder
seguir entrando el resto de su miembro. Fueron muchos intentos, todos fallidos,
y cuando quiso darse por vencido, Jaejoong fue el que tomó su pene y ayudó el
mismo a entrarlo.
Estando un poco más de la mitad
dentro, Yunho saboreó la gloria: Se sentía magnificó. De las pocas experiencias
sexuales que había tenido, esta no tenía comparación. Se sentía más apretado y
caliente, e incluso más excitante, ya que significaba algo prohibido. Yunho
cerró sus ojos y apoyó su rostro en la nunca de Jaejoong, colocando su mano izquierda
en el glúteo de este para apoyarse y su otra mano rodeándole el mentón para
acariciarlo. Jaejoong tenía ambas piernas juntas, solo su pierna izquierda
estaba un poco más elevada para permitirle un mejor acceso a Yunho.
Entonces iniciaron las estocadas.
Comenzando suave, Yunho trato de abrirse paso para que todo su pene pudiera
entrar. No quería ser violento ni duro, no quería hacer sufrir a Jaejoong, por
lo que se lo tomo con calma, meneándose lento, dejando en ocasiones breves
besos en la nuca y mejillas del castaño para consolar sus gemidos. Jaejoong
solo se mantenía con los ojos cerrados y la cara contraída, soportando la
intensa sensación de tener un pene partiéndole en dos. Él sabía los riesgos,
sabía que sería doloroso, así que decidió relajarse, esperar hasta el momento
en que resultara placentero.
Y no tardo mucho. Pronto, los
movimientos empezaron a ser mas fluidos, por lo que ambos pudieron disfrutar
mucho mejor. Yunho abrazó totalmente a Jaejoong desde atrás y este recibió su
abrazo, girando ocasionalmente su rostro para compartir besos abiertos y
mojados. El ritmo aumentó progresivamente, pero Yunho nunca fue agresivo;
primero, porque no quería herir a Jaejoong, y segundo, porque no quería que los
sonidos se hicieran tan audibles como para despertar a sus dongsaengs.
Era su pequeño secreto en la noche,
por lo que debían ser silenciosos… bueno, hasta donde fuera posible.
—Yunho-ah… —Jaejoong gimió, su boca
estaba abierta. —¿Cómo se siente?
—Como si fuera explotar en
cualquier… momento. —Respondió sobre su hombro. De verdad se sentía al límite,
así de abrumador era el estar dentro de su cuerpo.
Jaejoong
jadeó más duro. —¿Te
gusta?
—Si… Jae… mucho…
—A mí también me gusta, tu pene es…¡Ah!
De
repente, Jaejoong se erizó cuando una fuerte descarga corrió por su columna
vertebral. La posición en la que estaban no les permitía tener una penetración
muy profunda, no obstante, el ángulo de penetración si era el ideal para que el
pene de Yunho rozara su próstata. Jaejoong gimió más alto y batió su pene
cuando una oleada de increíble placer viajó por todo su cuerpo. Comenzó a
temblar, Yunho creyó que se trataba de un calambre al estar detrás de él e
inesperadamente Jaejoong se vino chorreando su semen entre sus dedos. Se quedo
por unos segundos paralizado, incapaz de reaccionar. Vaya, nunca imaginó que
tendría un orgasmo anal y menos en la primera vez. ¿Así de bueno era el sexo
con Yunho?
Regulando su respiración, Jaejoong
trató de asimilar lo que había acabado de ocurrir, hasta que se dio cuenta que
Yunho había salido de él y que ya no estaba a sus espaldas. Se echo
completamente sobre el colchón y abrió los ojos: Yunho estaba arrodillado
frente a él, con su pene aun erguido y lleno de ungüento y líquido pre—seminal.
Jaejoong lo miró perplejo. —¿Qué haces?...¿Por qué… te
detienes?
Yunho ni sabía porque había parado.
—Creí que…
—¡No, no!¡Sigue, sigue, no te
detengas! —Abrió las piernas y acercó el cuerpo de Yunho con sus manos,
desesperado por volver a sentir ese miembro en su interior. Le había dado un
orgasmo genial y no iba a estar satisfecho hasta que ambos tuvieran el segundo.
Obedeciendo, Yunho volvió a insertar
su pene y las embestidas no tardaron en retomarse. Se apoyó con sus manos a
ambos lados de Jaejoong mientras lo embestía ahora con mucho más ímpetu.
Jaejoong, aun embobado en su post—orgasmo, solo se mantenía gimiendo, de vez en cuando
desplazando sus manos por la cara, hombros, espalda o espalda baja de Yunho.
Jamás imaginó que Yunho fuera tan bueno para el sexo; tal vez al ser un
bailarín tenía el compas y la resistencia para mantener un ritmo.
Como fuera, le estaba haciendo ver
estrellas, le estaba haciendo tragarse sus palabras. Yunho no era aburrido… en
realidad era bastante apasionado. La imagen de este Yunho sexual tenía a Jae
tan confundido como excitado. El encuentro era tan placentero que ya hasta se
habían olvidado de sus nombres, mandando al demonio incluso su más pequeño
titubeo.
Se sentía tan natural que era como
si fueran una pareja de verdad.
En un momento dado, Yunho miró hacia
abajo, prestando especial atención al rostro extasiado de Jaejoong que pedía
por más. Jaejoong tenía esa expresión de “¡cógeme,
cógeme, cógeme!” que nunca se la había visto. O notado. O imaginado. Era
hermoso y no podía dejar de felicitarse internamente por haber tomado la
decisión de seguirlo en esa fantasía.
Si otro hombre estuviera en su
lugar… Urgg, lo hubiera matado.
Recostándose completamente sobre el
cuerpo de Jaejoong, Yunho lo enrosco en sus brazos y Jaejoong hizo lo mismo,
ocultando su rostro en el cuello de Yunho que lo aplastaba. Los vaivenes nunca
decrecieron de velocidad, al contrario, cada vez iban acelerando el paso.
Luego, lo sintió, una presión aguda
en su abdomen y los músculos de su entrepierna se contrajeron al anunciar que
se iba a venir. Yunho acercó su boca al oído de Jaejoong, susurrándole: —Estoy cerca, ya casi... —Quiso alejarse pero las
piernas de Jaejoong enrolladas sobre sus glúteos le impidieron hacerlo.
—Termina adentro, por favor. —Jaejoong
suplicó deseoso. —Quiero… que te vengas dentro.
El libido de Yunho subió a niveles inimaginables
al escuchar esas palabras. Aumento la rapidez, impaciente por llegar y cuando
lo hizo, una nube de placer y satisfacción lo cegó al liberar su leche entre la
estrechez de las piernas de Jaejoong.
Eso había sido delicioso.
—Yunho... —Jaejoong lo llamó y tomó su
rostro para que quedara frente al suyo. Él sonrió, viendo como Yunho tenía (al
igual que él) las mejillas rojas, las pupilas dilatadas, y el rostro y cabello
bañados en sudor. No pudieron evitar reírse al verse en ese estado. Tal vez eso
era mejor que pensarlo en profundidad. —Te quiero. —Le dijo mientras lo besaba con pasión y batía su pene
que no se había descargado aun.
Pensando en los vaivenes, las
caricias y el pene caliente que aun seguía en su interior, Jaejoong eyaculó
exhalando un gemido ronco, doblándose en éxtasis al sentir como sus músculos
recibían las corrientes eléctricas. Sintió a Yunho tomar su pene rojo y
acariciarlo, besándolo también mientras lentamente se apartaba y salía de su
cuerpo. El semen atrapado en seguida resbaló por sus nalgas.
Definitivamente esta había sido la
mejor experiencia sexual que ambos habían tenido.
Rodando por la cama, Yunho se quedo
mirando el techo. Jaejoong hizo lo mismo. Los sonidos característicos de la
noche (las luciérnagas, el crujir de la madera, el viento golpear los arboles)
era lo único que se escuchaba junto a las respiraciones irregulares y vaporosas
de los dos chicos. Fueron varios minutos en los que ninguno se atrevió a decir
palabra; dejarían que la situación fluyera con naturalidad.
—¿Te sientes mal? —Fue Jaejoong el
que decidió romper el hielo cuando creyó que había pasado el tiempo suficiente.
Su pecho todavía subía y bajaba con violencia, aun se encontraba extasiado.
—¿No fue tan raro… cierto?
—No. —Yunho respondió con
sinceridad. —Estuvo bien, supongo…
Jaejoong se mordió el labio, él no
se conformaba con un simple “bien”. —Si quieres que te sea sincero, no creí que
cumpliría esta fantasía y menos contigo. De todos los hombres que me hubiera
imaginado… tú eras el menos probable.
Oh no. —¿Entonces lo volverías a
hacer con otra persona? —Yunho preguntó cuando la angustia de pensar en
Jaejoong con otro hombre volvió a atormentar su cabeza.
—¿Qué? Yo no dije eso. —Jaejoong se
apresuro a negar, aproximándose al costado de Yunho y recostándose sobre él,
dejando caer su cabeza sobre los pectorales de este. —No creo que lo vuelva a
probar, me gusto estar contigo. —Le dijo para calmarlo. Era verdad, el único
lugar en donde quería estar era en los brazos de ese hombre.
Satisfecho con la respuesta, Yunho
acobijó el cuerpo del mayor y pasó las cobijas desordenadas por sobre sus
cuerpos, apoyando también su cabeza en el cabello húmedo y castaño de Jaejoong.
Una de sus manos fue a parar a sus glúteos desnudos, luego a su ano,
acariciándolo a sabiendas que debía estar adolorido.
Jaejoong emitió un quejido por la
caricia, incomodo.
—¿Te duele? —Yunho le preguntó. —¿Fui muy brusco?
—Solo espero pueda caminar
mañana. —Jaejoong
bromeó y Yunho se rió por sus ocurrencias.
—Lo siento si fui rudo, no me
supe controlar.
—No fuiste rudo Yunho. En
realidad fuiste muy dulce, nunca me había sentido tan amado haciéndolo con
alguien.
Yunho suspiró profundo por esas
palabras. Era verdad, él había sido dulce, porque Jaejoong era alguien digno de
ser tratado con cariño. Y besado. Y amado…
…Vaya, aun no lo asimilaba. ¿En
verdad lo habían hecho? ¿En verdad había tenido sexo con su amigo? Se sentía
como si no fuera real. Como si alguien lo hubiera poseído y ahora hubiera
vuelto a su yo normal. Sentía vergüenza, eso no lo podía negar, aun así una
parte de él no se retractaba de nada de lo que había experimentado esta noche.
Y todo había sido gracias a la fantasía
de Jaejoong.
—Jae gracias.
Jaejoong, quien había cerrado
momentáneamente los ojos, los volvió a abrir al escuchar el extraño
agradecimiento de Yunho. —¿Eh? ¿Por qué?
—Por las locuras que me haces
hacer.
Estirándose para apagar la luz de la
lámpara, Yunho no dijo nada más y se dispuso a dormir junto a Jaejoong,
queriendo disfrutar las horas que quedaban hasta cuando la mañana llegara.
Estaba seguro que una vez despertara y recapitulara todo sentiría remordimiento,
pero por ahora eso no importaba.
Por ahora solo quedaba dormir y
descasar en paz.
Jaejoong también opto por quedarse
en silencio y dormir en el pecho de Yunho, sintiéndose feliz, pensando que
aunque a veces su impulsividad lo metiera en aprietos…
…en ocasiones como esta, si que le
sabía sacar provecho.
..
Antes de que el sol saliera por
detrás de las montañas, Changmin se levantó de su cama y deslizó muy
cuidadosamente la puerta corrediza entre las dos habitaciones, con cuidado de
no despertar a sus hyungs que dormían dentro.
Caminó en puntillas hacia el baño y
cuando salió de este, algo en la cama le hizo desviar su atención. Eran sus dos
hyung quienes estaban aparentemente desnudos, cubiertos con una fina sabana y
en una posición algo extraña: Jaejoong boca abajo y Yunho recostado sobre su
costado, también boca abajo y con un brazo reposando sobre la espalda de
Jaejoong. Para ellos no era inusual dormir en una misma cama desnudos, lo raro
era que la posición en la que estaban insinuaba algo mas… se veía erótico.
En un momento dado, Jaejoong se dio
la vuelta, tan enérgico que Changmin creyó que se había despertado. Pero no fue
así, solo se reacomodo, quedando su cara a muy pocos centímetros del rostro
sereno de Yunho. Estaban tan cerca que parecía que se iban a besar.
—Déjalos dormir.
Una voz a sus espaldas y Changmin se
volteo para ver a Yoochun quien también se había levantado.
—¿Tienes idea de lo que pasa?
—El
menor preguntó al dar un paso afuera y dejar que Yoochun deslizara la puerta.
—No estoy seguro, pero lo
mejor es que los dejemos descansar. Al parecer anoche no descansaron nada.
Con una sonrisa sabelotodo, Yoochun
les dio una última mirada y deslizo la puerta, dejando a un Changmin que,
aunque confundido por las palabras, no decidió indagar más.
..
Nota: Aquí estoy de nuevo después de meses de no publicar nada. Este One shot lo había escrito hace tiempo (ya saben que siempre digo que tengo escritos sin terminar) y bueno, lo había estado terminando de a poquitos y este es el resultado final. Espero que les gustes. Me gusta escribir cuando tvxq estaba junto antes de que fueran esta boyband emo jajaja
Tengo pensado una continuación, así que quizá sea un two shot.
Dejen sus comentarios, bye!
me encanto el yunho celoso no quiso que nadie toque a su Jae esta bien que el realice todas las fantasías de su Jae así no probara con nadie que no sea el mismo y el yoochun si que los estuvo escuchando y por eso se dio cuenta que no durmieron bien
ResponderBorrarGracias espero que si lo continúes
gracias por compartir tu oneshot, me alegra que apoyes al yunjae *^* la verdad me gustó mucho, yo tengona inclinación hacia el yunjae meloso de los te amo y jutnos forever a pesar de todo ya que pues siempre me recuerda que los shipeo en la vida real y me dan mucha ternura
ResponderBorrar<3
aunque sea toda celosa insoportable con el yj no me importa en fin a mi yunho no me engaña esos no eran solo celos y solo un experimento era amor pero se las dio de mennso y por eso no le fue dificil "sacrificarse por jaejoong" o si no nole hubiera nacido lo dulce y amoroso :) gracias al presidente de las yunjae por hacer propicia la decisión de compartir la cama con el voldemin y duckbutt <3
gracias sigue apoyando a nuestros chicos, ellos se lo merecen AKTF!!
A mí me facino que Yunho haya estádo celoso ya que el no quiere que nadie toque a su Jaejoong ya que el es único que puede complacerle en sus fantasias gracias por este capítulo esperaré la continuación
ResponderBorrarUhhhh un Yunho celoso de que Jae comparta caricias con alguien que no sea el jejejeje pero bueno espero que para ellos esto sea un gran inicio... Y ellos pensando que fueron silenciosos Jejejeje Chun y min los descubrieron jejejeje gracias x compartir besotes... 😘😘😘😘😘😘
ResponderBorrarSiii por favor lo ame y mucho
ResponderBorrarQuiero un twoshot
Si pliss
Gracias
Jajaja, si de por sí un Yunho celoso con Jae y siendo solo amigos, me imagino ahora que hicieron el amor será también muy posesivo con el y gracias a la fantasía sexual de Jae realizó también la suya al tener a su mejor amigo solo para el.
ResponderBorrarGracias!!!