sábado, 23 de enero de 2016

Lady Marmalade - Tercera entrega


Tercera Entrega


P
aris despertaba con un clima agradable ese día, y Jaejoong aprovecho la oportunidad para salir a dar un paseo en su reluciente coche Renault 40 CV. Algo inusual para un personaje de vida nocturna como Jaejoong. Generalmente como no movía ni un dedo ya que no tenía que preocuparse por trabajar, el heredero se quedaba casi todo el día durmiendo en su cama, recuperándose de cualquiera resaca producto de alguna borrachera que hubiera tenido la noche anterior, para, por la noche, volver a emborracharse de nuevo. Eso era su rutina de todos los días, por lo que parecía extraño que justo ese día hubiera tenido ganas de salir de su escondite diurno, aunque quizá todo eso se debía al buen humor con el que estaba el muchacho.

Y es que desde esa noche que Jaejoong había “ganado” en su disputa con el “muerto de hambre” de Yunho,  sus ánimos de hacer cualquier cosa habían rejuvenecido.  Jaejoong tenía que admitir que lo que más les satisfacía no era el hecho de que lady marmalade hubiera quedado impresionada por su regalo, sino el hecho de que había ridiculizado a Yunho y lo había derrotado en la primera contienda que tenían.

“No será fácil tratar conmigo, Jung Yunho”  pensó sonriente mientras miraba desde la ventana del coche a los citadinos caminar por las calles.

—¿No le pareció gracioso la manera en que ese don nadie se quedó mirando luego del regalo que le di a Lady Marmalade?

El guardaespaldas Yoochun, quien estaba a su lado volteo, un poco sorprendido por la pregunta de su jefe, ya que esté pocas veces le dirigía la palabra a no ser que fuera para ordenarle alguno de sus caprichos.

—No lo sé, no me di cuenta. —respondió seco, casi no le gustaba tratar con él.

—Pues se lo perdió, fue muy gracioso. —Jaejoong comentó con una sonrisa, siguiendo con su mirada fija en la ventana.

Llego un momento de silencio pasajero hasta que Yoochun se atrevió a romperlo, preguntando algo que no sabía muy bien si debía preguntar. —¿Por qué le regalo esa joyería tan costosa?

Jaejoong arrugo el entrecejo. —Para conquistarla, obviamente. Las mujeres aman las joyas.

—¿Pero usted no desea conquistarla…o si?

El peli castaño se volteo a mirarlo. —Claro que sí, ¿Por qué cree que me preocuparía si esas no fueran mis intenciones?

—Porque parece que lo estuviera haciendo más bien para complacer a alguien.

—¿Qué quiere decir?

—Que su padre tal vez tiene mucho que ver con esto. —Yoochun comento, obviamente ignorando lo imprudente que estaba siendo.

—¿Y usted con qué derecho viene a decirme esto? No es asunto suyo ni le pedí su opinión. Así que agradecería que mantuviera su bocota cerrada.

Yoochun obedeció y se quedó callado, no sin antes murmurar un leve “Bien, pero ni siquiera usted puede negar que no tiene ni el más mínimo deseo de estar con esa chica” provocando que Jaejoong lo encarara y le exigiera repetir lo que había dicho. Pero antes de que el asunto pasara a mayores, el chofer los interrumpió, diciéndole a Jaejoong que el transito estaba lento porque al parecer había una multitud reunida en algún punto de la calle. Exasperado al ver que no conseguía avanzar ni un centímetro, Jaejoong se bajó del auto, con ansias de averiguar qué era lo que trancaba el tráfico.

—¡Damas y caballeros, están a punto de presenciar el acto de magia más impresionante de todo parís, más bien, de todo Europa!

Jaejoong se abrió paso entre los transeúntes y cuando estuvo en la fila de enfrente de la multitud, él pudo comprobar que las casualidades no eran exclusivamente cosas de la ficción. Era nada más ni nada menos que Jung Yunho quien lideraba el espectáculo acompañado de su amigo de la noche anterior. Genial, no solo tenía que lidiar con él en el molino rojo sino que también ahora se lo encontraba en la calle.

Haciendo un acto de ilusión, Yunho comenzó con un truco sencillo, utilizando dos jarras de metal llenas de agua que parecían cambiar de volumen de contenido cada vez que pasaba el agua de una a otra. Luego cuando estuvo a punto de verter el contenido sobre los espectadores, el agua misteriosamente desapareció, dejando a todos los asistentes atónitos, para luego él mostrar que las dos jarras estaban completamente vacías y bromeando que quizás el agua había escaseado como escaseaba normalmente en las tuberías de París.  Yunho no solo tenía talento para los trucos de magia, también tenía un carisma innato, una chispa que le permitía conectarse con su público, y por consiguiente obtener más propinas.

—¡Gracias! ¡Gracias!—Yunho hacia leves reverencias al público mientras que Junsu caminaba alrededor, recogiendo el dinero en un sombrero. Paso en frente de Jaejoong pero no pudo reconocerlo ya que este ni siquiera hizo el amago de querer depositar alguna contribución. En su lugar, el peli castaño se quedó ahí con los brazos cruzados y la mirada fija, viendo como la gente vociferaba y quedaba encantada con otro truco, mientras que Yunho se vanagloriaba de las alabanzas que recibía. Jaejoong se mordió la boca, odiaba ver como otra persona se llevaba toda la atención y con mayor razón, si esa persona se trataba de Jung Yunho.

—¿Ya termino con sus jueguitos? Esta obstaculizando toda la calle. —Lleno de envidia e importándole poco lo que la gente diría, Jaejoong comentó, haciendo que tanto Yunho como los espectadores voltearan a mirarlo.

Y contrario a lo que hubiera esperado, al verlo Yunho solo le dedico una sonrisa confiada, retornando su atención de nuevo a su público.

—Para mí próximo truco necesitare un voluntario —comenzó a hablar, ignorando totalmente al otro —y creo que alguien ya se está ofreciendo. —De la nada, Yunho saco de su manga una gran cadena de pañuelos amarrados y la lanzo hacia la muñeca de Jaejoong, amarrándose fuertemente alrededor de está como si de verdadera magia se tratara. Luego él jalo los pañuelos haciendo que Jaejoong trastabillara y se precipitara al centro del escenario, justo al frente de Yunho.

—¡¿Qué crees que estás haciendo?! —Jaejoong susurró amenazadoramente mientras intentaba desatarse del agarre.

—Solo te estoy volviendo parte del show ¿No quieres ser el centro de atención?

Le preguntó y Jaejoong solo arrugo la cara, visiblemente molesto. Yunho lo haría el foco de atención de la peor manera posible y él lo sabía.

—¡Todos denle un fuerte aplauso a mi voluntario el día de hoy, el guapo heredero Kim Jaejoong!

La multitud vociferó mientras Yunho hacia que Jaejoong levantara el brazo jalando los pañuelos, manejándolo a su antojo como si de una marioneta se tratara.  Jaejoong intentó resistirse pero era tal la fuerza de Yunho que poco podía hacer ante sus jalones.

—Tal vez no muchos de ustedes lo sepan, pero él es el autoproclamado hombre más rico de todo París. Ahora, ¿Por qué un hombre de tal alcurnia estaría de asistente en un show callejero como este? ¿Qué, incluso la clase alta de este país también tiene que rebuscárselas cómo puede? ¿O es que el hombre no es tan rico después de todo? —Yunho lo estaba ridiculizando ante la audiencia, quizá sacándose la espinita que tenía clavada desde la última noche que se encontraron.  —Le voy a pedir muy amablemente a mi voluntario que me entregue su billetera para la realización del siguiente truco.

—¡No te voy a entregar nada! —Jaejoong de inmediato respondió, luchando contra la cadena de pañuelos que lo mantenía amarrado a Yunho.

—Oww parece que nuestro voluntario necesita algo de motivación —Yunho animo al público provocando que toda la audiencia comenzara a exigirle a Jaejoong colaborar con el truco. El castaño obviamente no tenía ni la mínima atención de hacerlo, es más él ni siquiera debía estar en esa situación tan bochornosa.

“¿Dónde carajos está Yoochun?” pensó para sí mismo cuando no pudo encontrar a su guardaespaldas y se maldijo mentalmente en que haya sido tan descuidado de no salir con más guardaespaldas (o al menos con guardaespaldas más eficientes) que lo sacaran de ese aprieto.

—Oh parece que no va a ayudar…entonces tendremos que hacer algo al respecto.

La voz de Yunho lo volvió a la realidad y antes de poder evitarlo, su otra mano ya se encontraba apresada de la misma manera en que estaba la otra, dejándolo ahora a merced completamente del más alto. En definitiva, algo que no podía negar Jaejoong era la habilidad que tenía Yunho para hacer esas artimañas de magia.

“¿Y esto como sucedió?”

—Junsu, Por favor.

Y como si Junsu supiera exactamente lo que quería Yunho, este fue hacia donde Jaejoong y comenzó a requisarlo de abajo hacia arriba, causando que Jaejoong se retorciera para no permitirle sacarle nada. Yunho afianzo su agarre en las muñecas de Jaejoong, inmovilizando. Realmente estaba disfrutando tenerlo así: sometido y completamente a su disposición.

—¡La encontré! —Junsu grito y alzo la billetera sobre su cabeza, entregándosela inmediatamente a Yunho. Con agilidad, Yunho tomo con una mano ambas cadenas de pañuelos con los que inmovilizaba a Jaejoong y con su mano libre recibió la billetera, empezando a requisarla una vez estuvo en su poder.

—¡Espera! ¡No puedes hacer eso, es un delito!

El moreno hizo caso omiso a las quejas y comenzó a sacar uno por uno los muchos billetes de todas las denominaciones que Jaejoong tenía en su billetera.

—Wow, parece que nuestro invitado en realidad si tiene mucho dinero.

A Jaejoong le provoco burlarse. —¿Asombrado de todo el dinero que nunca podrás tener, Jung Yunho? Apuesto que nunca habías tenido entre tus manos tal suma.

Yunho volteo a ver a Jaejoong, a encarar esos ojos desafiantes con una sonrisa. —En realidad no lo necesito. Ya saben lo que dicen: Hombre con gran billetera, es porque algo le falta ¿Acaso tratas de compensar algo de lo que escaseas? —Yunho echo su chiste de doble sentido mientras lo miraba de arriba a abajo. La multitud se rió discretamente  y Jaejoong solo se mordió los labios. Ese Yunho ahora si estaba yendo demasiado lejos.

—Veamos, ¿En que podría gastar toda esta cantidad de dinero? Ya sabemos que a los ricos les encanta gastar en estupideces...como pagarle a un pobre diablo por dejar de acercarse a una mujer por ejemplo. —Se burló —No sería diferente si en vez de eso, yo simplemente lo…quemara —Tomando un puñado entre sus dedos, Yunho hizo aparecer una llama de fuego, reduciendo lo que antes eran billetes a simples cenizas.

A Jaejoong casi le da un paro . —¡¿Qué crees que estás haciendo?!

—O podría regalarlos. —tomando otro puñado, Yunho los lanzo hacia la multitud exaltada que muy eufóricamente recibía el dinero.

—¡Detente, detente! ¡¿Quién te crees que eres?!

—O sencillamente podría desintegrarlos —con sus dedos froto los billetes restantes hasta hacerlos desaparecer. —¿Ves? El dinero se puede ir de las maneras más tontas posibles.  Realmente solo es un pedazo de papel que tiene el valor que nosotros queremos darle y que se utiliza para comprar cosas que incluso nosotros subestimamos su verdadero valor.

—¡¿Qué es esto?! ¡¿Alguna especie de moraleja!? ¡Suéltame ahora mismo y devuélveme mi dinero! —Logrando al fin liberarse del agarre de Yunho, Jaejoong se quitó las vendas de sus manos y se colocó en frente a este, tratándose de recomponer. —¡Entrégueme mi dinero en este mismo instante! —Estiró su mano. Su cuerpo titilando de ira.

—Yo no tengo tu dinero.

—No estoy para sus juegos, ¡Deme mi dinero!

—Te he dicho que ya no lo tengo.

—¡Y yo te he dicho que me lo entregues! ¡No puedo creer que haya sido robado en frente de toda esta gente! ¡Eres un ladrón!

Completamente enojado, Jaejoong se dispuso a salir de ese lugar pero antes de que pudiera hacerlo la voz de Yunho lo detuvo, haciendo que se quedara.

—¡Espera! Yo no tengo tu dinero porque tú lo tienes ahora. Revisa tu bolsillo. —Yunho ordenó y Jaejoong le obedeció, verificando con incredulidad como su billetera efectivamente si estaba dentro de su bolsillo. —Si quieres puedes comprobar que todo tu dinero este ahí dentro. Como dije antes, no tengo necesidad de quedármelo.

Los aplausos del público no se hicieron esperar y Yunho solo pudo responderles con una leve reverencia y con su característica gran sonrisa. Jaejoong, evidentemente humillado, se giró decidido a por fin dejar el escenario.

—Wow, creí que un voluntario como usted dejaría algo de propina. No pensé que fuera tan avaro teniendo tanto dinero. —Sin dar esto por terminado Yunho remató, provocando que Jaejoong se volteara y le arrojara en la cara un billete de 500 francos (la denominación de más grande existente en la época).

—Por lo menos deme las gracias que podrá comer algo decente hoy. —Sin agregar nada más, el peli castaño se abrió paso entre la multitud y se subió a su costoso coche, abandonando el lugar en un santiamén.

Sin dejar que eso le afectase, Yunho siguió haciendo reverencias a su audiencia mientras que esta se disipaba y volvía a sus actividades normales. Luego de que ya no hubo más gente en el lugar, Yunho se sentó en una especie de caja de madera que había en su escenario y se dispuso a relajarse; tomando agua y aflojando sus músculos. Ese había sido un show muy agotador.

—Creo que te pasaste un poco de la raya. —Junsu le comento sentándose a su lado, tomando también un sorbo de agua. 

—¿De qué hablas? Solo le jugué un par de bromitas tontas, nada más. —le respondió, tratando de actuar inocente. Dentro de sí, él también sabía que quizá si se había pasado un poco. Tan solo un poco.

—¿No crees que pueda tomar repercusión por esto?

—Tal vez, pero sea lo que haga no me dejare intimidar.

Junsu chasqueo la boca. —Se ve que no le tienes ni una pizca de miedo.

—¿Y porque lo tendría? —Yunho se rio. —Ese tipo no es más que un mocoso dándose ínfulas de poderoso. He tratado con hombres así. Sé que no hay porque temerles.

—Bueno puede ser que su personalidad no sea tan poderosa como intenta reflejar, pero un hombre con dinero siempre va a ser de cuidado. Nunca sabes lo que pueden hacer para conseguir lo que desea.

—Es por eso que son la peor clase de persona. —Yunho suspiro, sacando de su bolsillo un cigarro.

Unos minutos de silencio pasaron. Junsu aprovecho para arreglar su pequeño escenario improvisado preparándolo para el siguiente show, no quitándole la vista a su amigo. Todo este asunto con el ricachón de Jaejoong le parecía innecesario. Innecesario e infantil. ¿Qué razones tenia Yunho para enfrentársele así? Junsu sabía muy bien que aunque Lady Marmalade fuera una mujer exuberante, Yunho no tenía mayores intenciones con ella. Más bien todo eso lo hacía para amargarle el momento a Jaejoong, tomando eso como un juego más que otra cosa. Pero ¿Realmente valía la pena?

—Solo te voy a decir algo Yunho —Junsu hablo segundos después cuando tuvo el escenario casi listo para la próxima presentación —cuida muy bien tus palabras y tus acciones. No sabes lo que puedes provocar.

—¿Todavía sigues con ese tema? Creí que ya lo habías olvidado.

—No lo puedo olvidar porque me siento intranquilo. Soy tu mejor amigo desde hace años y sé lo obstinado e imprudente que puedes llegar a ser. Y eso te podría afectar. Y cualquier cosa que te afecte a ti, podría afectarme a mí.

Yunho se levantó de su asiento, botando su cigarrillo lejos y encarando al menor que tenía una seria expresión de preocupación en su rostro. —No te agobies Junsu, esto es entre él y yo, no debes porque estar involucrado. —A continuación Yunho le ofreció un abrazo amistoso a su compañero, tratando de alejar su ansiedad.

Pero Junsu aún se sentía intranquilo. —¿Cuáles son tus razones para hacer esto Yunho? ¿Es solo para no dejarlo ganar o en verdad si estás enamorado de esa mujer?

Yunho respiro profundo, mirando hacia al frente. —No me gusta cuando las personas malas obtienen lo que quieren, más aun si son personas egocéntricas que creen que por tener dinero pueden hacer lo que se les venga en gana.

—Bueno, pero eso no es de tu incumbencia después de todo.

—Se convirtió de mi incumbencia cuando el estúpido llego a ofrecerme dinero. Él fue el que se lo busco.

—Aun así creo que te estas involucrando demasiado y no deberías.

Yunho rodo los ojos ante la enésima advertencia de su amigo. No entendía porque Junsu se preocupaba tanto si a la final esto no era más que un simple pasatiempo para él. Molestar a Jaejoong era de cierta forma entretenido por lo que no veía nada de malo continuar hasta donde pudiera. Además, al momento que se llegara a aburrir simplemente lo dejaría, por lo tanto estaba seguro que esto era completamente pasajero.

—Junsu, —hablo una vez más, intentando con esto callar todos los pensamientos angustiosos de su amigo —Yo sabré cuando parar así que relájate, estás haciendo una tormenta en un vaso de agua. En realidad no es nada importante. —Palmeo el hombro de su amigo y se dispuso a continuar ordenando lo que su amigo había dejado inconcluso —Mejor ve y alístate. Tenemos un show que continuar.



..



Noche festiva en el Molino rojo.

Las chicas agrupadas en línea bailaban el célebre Can Can, ondeando sus aparatos vestidos y realizando patadas altas que dejaban chismosear a los espectadores tanto sus piernas como su atrevida ropa interior. Una parte del público, eufórico, también bailaba, contagiado por la alegría de las bellas bailarinas, mientras que la otra parte tan solo aplaudía mientras se seguían emborrachando con costosas bebidas de alcohol. Había risas, purpurina, luces por todas partes, sin embargo, Jaejoong desde su exclusivo balcón tan solo permanecía ahí…anclado a una silla bebiendo tranquilamente su copa de champagne. Él echo un vistazo a su alrededor; hasta sus guardaespaldas parecían más emocionados con el show.

Jaejoong lucia indolente, ajeno al ambiente y ni el mismo sabia porque. ¿Había sido su desagradable encuentro de la mañana con el artista callejero que lo tenía así? ¿O era la falta de motivación quizá? No, no podría ser eso. Lady Marmalade no le había quitado la vista de encima y de vez en cuando le mandaba besos voladores o miradas picaras desde el escenario donde bailaba con sus demás compañeras. Era bastante notorio que la bailarina también sentía un interés por él, por lo que un cuarto del trabajo estaba hecho. Como lo había previsto, él no tendría la necesidad de esforzarse mucho por obtenerla, pero…. ¿Realmente era lo que quería?

—¿Pero usted no desea conquistarla…o sí?

Los recuerdos de la conversación que había tenido con su guardaespaldas en la mañana invadieron su mente.

“Claro que lo deseo, ella es una mujer hermosa” su mente respondió mientras miraba a la joven divertirse en el escenario. Su gran vestido, su piel blanca y su cabellera deslumbrante…todo en ella parecía brillar. En verdad, sobresalía entre las demás.

“Lo deseo…La deseo” en su cabeza repetía, tratando de convencerse.

—Porque parece que lo estuviera haciendo más bien para complacer a alguien.

—Mi padre…—de repente murmuró, lo suficientemente bajo para que solo fuera audible para él mismo.

Aunque lo intentara negar, su padre era el que había sido el de la idea en primer lugar y también era él el que lo orillaba a conseguir su propósito. Por más que se convencía no podía ocultar ese hecho, pero Jaejoong estaba tan ensimismado en la idea de agradarle a su padre, que hasta las aspiraciones de él las tomaba como suyas.

—Si mi padre desea eso, entonces yo también lo deseo.

Dijo. Esta vez fuerte y claro. Tan fuerte que su guardaespaldas Yoochun lo escucho pese a toda la algarabía que había en el lugar.

—¡Silencio, silencio todos! —La voz de marmalade resonó en el sitio, haciendo que el sonido de la música, las risas y murmullos mermaran al instante —Hoy quiero brindar por un invitado muy importante que siempre acude a nuestra casa, el molino rojo, todas las noches sin falta. Quizá algunos de ustedes lo conozcan, quizá la mayoría no sepa de quien se trate, pero sin duda él se está ganando un lugar muy especial en el corazón del molino rojo… ¡Todos alcen sus copas por el guapo heredero Kim Jaejoong!

Esa entrada que se le había hecho muy similar a una que había escuchado ese mismo día inundo los oídos de Jaejoong. De pronto, Su vista se vio enceguecida cuando el reflector de luz lo ilumino y él pudo ver como todos los asistentes voltearon su rostro para verlo a él.

—¡Salud! —con una copa en la mano ella brindo y todos la imitaron, quizá lo bastante borrachos para no importarles por quien es que estaban brindando.

—¡Salud!

Las voces se mezclaron en un unísono y Jaejoong estaba tan confundido que no pudo ver como Lady marmalade dejo de verlo a él y dirigió su atención a un lado, a un hombre que tenía exactamente la misma sonrisa de ella. Ellos compartieron miradas, cómplices.

—Salud. — Jaejoong repitió cuando al fin reaccionó y tomo un gran sorbo de champagne, enfocando su vista luego, en la multitud que aún lo observaba.

Él inspecciono los cientos de rostros, buscando a alguno que se pareciese al artista. No lo encontró. Yunho no había ido esa noche y quizá, solo quizá, esa era una de las razones del porque se encontraba tan aburrido.




..

Nota: Si, se que Jaejoong es algo pesado en este Fic, pero me gusta escribirlo asi porque creo que no habia escrito un Jaejoong malo por decirlo de alguna forma en alguno de mis anteriores historias.

Espero comentarios y gracias por leer.



10 comentarios:

  1. Ya le empieza a hacer falta yunhoo .me encanta esta relacion q tienen como dicen del odio al amor solo hay un pasoo y ello solo les quedan unos cuantos cm . Gracias por el capi nena. Actualiza prontoo .

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  2. Ohhh el no es malo simplemente le quiere agradar a su padre y usa cualquier medio para complacerlo. Y el no se da cuenta de lo q en verdad necesita. Waaaa estos dos me matan ya están empezando a extrañarse y el otro a reflexionar xq continúa con esto. Waaa gracias por la actu esta interesante. Besos.

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  3. este Jae ya esta reflexionando y se esta dando cuenta que el tiene interés en esa mujer para darle gusto a su padre pero creo que el que a el le interesa es Yunho ya que del odio a el amor solo hay un paso y espero que pronto lo de Jae
    Gracias por el capitulo espero por mas

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  4. Yunho se paso jajjaja le hizo la verguenza de su vida. Pero si que jae extraño por a si decirlo a Yunho. Jae se esta interesando por yunho, no lo admite pero se que se esta interesando *.* ya quiero leer como va ser cuando en este par se desate la pasion *q*
    Gracias por el cap ^^

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  5. Hola garacis por tu fanfic si jaejoong malito es tan hermoso

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  6. Lady mermelada esta en tercera plana ya. Ahora todo es entre Yunho y Jae. Adoran molestarse y piensan lo peor del otro. Pero como dicen, del odio al amor hay solo un paso. Me encanta! Muchas Gracias! :-) <3

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  7. Me encanta!!!
    Me agrada esta nueva historia y el rumbo que va llevando, además que los personajes estan excelentes ;-)
    Veamos que pasará con lady mermelade, seguramente querra asar dos conejos pero nunca se obtiene lo que se quiere en esas condiciones :P

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  8. Jae esta sintiendo la ausencia de Yunho ya comisa la historia yunjae ^^

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  9. Digamos que Jaejoong malo malo no es ese comportamiento es solo por lo que dijo su padre y solo para quedar bien frente de el tsk perovque tenemos ahí alguien extraña a cierta personitas que lo saca de sus casillas XD
    Gracias

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  10. De hecho a mi me parece bien que hayas puesto a jaejoong con esa personalidad por que es mas interesante(aunque ya lo haya leído como en mil personajes diferentes) xD ese jaejoong es tan versátil (?) Jajajajaja
    Bueno pues la verdad me da miedito ya lo que vayan a hacer changmin y Lady marmavil (?) 😂 por que siento que la relación de yunho y jaejoong esta cambiando 😏😏😏 y si,me refiero a la atracción .... Yunjae fighting!!!
    Gracias por el cap!

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