Capítulo 3
– 7:20 PM
—¡Maldición!- grito el manager
exasperado. Enojado por toda la situación que estaba pasando.
Se había enterado que yunho había
escapado así como así, y no sabían a donde se habría ido y cuáles fueron las
razones de hacer semejante locura.
Todo el staff de tvxq y la sm que
estaban encargados del come back de tvxq se encontraban en ese camerino de la
KBS. Todos con la misma cara seria, brazos cruzados, mirándose unos a otros sin
saber que decir o hacer. El manager era el único que se movía alrededor de la
habitación lanzando maldiciones al aire.
La estilista que anteriormente
habría tratado de detener a yunho, estaba sentada en el sofá, bañada en
lagrimas con sus manos cubriendo su rostro. Una de sus compañeras tenía una mano
sobre su espalda tratando de consolarla. El manager y los miembros del staff le
habían echado la culpa injustamente por dejar escapar a yunho. Le habían
regañado.
—Yo...no…pude…alcanzarlo- sollozaba
la mujer, tratando de hablar- …corría tan...rápido…lo siento- se echo a llorar
una vez más.
—Mierda, ahora que irán a decir los
directivos cuando les contemos que yunho ha escapado y echado a perder toda la
transmisión de esta noche- dijo el manager furioso- ¡Mierda, Mierda, Mierda!
Changmin que reposaba en una de las
mesas del camerino, con los brazos cruzados y mirando hacia el piso, solo meditaba
en silencio. No podía ser posible que yunho hubiera dejado así como así toda la
presentación. No lo entendía. Sabía que yunho estaba nervioso con su come back,
pero no era ni remotamente la primera vez que se presentaba en un escenario, y
sabía que él era muy profesional como para abandonar el set solo por un ataque
de pánico. Yunho no era así, algo debió de haber pasado.
—Lo llamare- dijo Changmin después
de un rato, sacando su teléfono de su abrigo.
—¡Por fin alguien hace algo!-
exclamo el manager levantado sus brazos a los costados para luego volver a
dejarlos caer.
Changmin marco el número
de yunho, esperando que este le contestara. “Por
favor Hyung contesta” pensó.
..
Seguían encerrados en ese armario.
Tan solo esperando que su verdugo llegara, ojala nunca pasara, pero su
posibilidad de ser encontrados era de unas 99 sobre100. De pronto, el hombre
sorpresivamente cambio de dirección yendo justamente a la salida del gran
corredor, pensando que tal vez yunho y jaejoong estuvieran escondidos en otra
parte, pero entonces paso. El celular sonó. El jodido celular sonó.
♫ Baby
catch me catch me catch me if you can ♫
La nueva canción del álbum de dbsk,
era el timbre del celular de yunho. Los había delatado, ahora estaban perdidos.
El hombre volteo su cuerpo, con una
mirada demencial, caminando hacía donde provenía el ruido. Camino lo más rápido
que pudo, tratando de alcanzar la manija de la puerta, pero yunho fue más ágil
y logro cerrarla completamente de una patada. Puso a jaejoong en el suelo y
aseguro la puerta con el cerrojo.
El hombre empezó a darle patadas y
golpes a la puerta intentándola abrir. Al ver que no funcionaba, saco su
cuchillo y comenzó a clavarlo en la puerta para ver si se rompía. Era una
puerta vieja de todos modos.
Yunho hallo el interruptor de la luz
del armario y comenzó a buscar algo que le sirviera para defenderse en caso de
que el demente lograra romper la puerta.
—Ahí- Jaejoong señalo desde el piso
con sus manos atadas.
Había una puerta. Curioso, Yunho la
abrió descubriendo unas escaleras que conducían hacia abajo. Sin pensarlo dos
veces, volvió a alzar a jaejoong en brazos y bajo por la escalera, llegando a
un sótano.
Prendió la luz y pudieron ver que el
sótano también estaba lleno de fotos de jaejoong por todas partes. El tipo era
un maniático.
Yunho poso a jaejoong sobre un
colchón desnudo que yacía sobre una especie de cama, vieja y oxidada. Trato de
nuevo de quitarle las vendas sin obtener ningún resultado.
—Yunho-ah, duele- se quejó Jaejoong.
—Tenemos que salir lo más pronto de
aquí- dijo yunho, intentando esta vez con las vendas de los pies.
—¡Ahhh!- Jaejoong dejo escapar un
gemido de dolor. Un gemido que se había escuchado muy sensual a los oídos de
yunho.
Yunho miro por un momento a
jaejoong, y luego negó con la cabeza volviendo a hacer lo que estaba haciendo.
No era tiempo de pensar estupideces, aunque eso había sonado tan…seductor.
Incluso jaejoong se veía totalmente apetecible de esa manera, atado de pies y
manos, con su pelo alborotado y su camisa medio abierta…dios, no podía estar
pensando en eso en estos momentos. “por
favor, yunho cálmate” pensó concentrándose en deshacerse de los nudos.
—Bésame Yunho- Jaejoong había dicho
mientras deliraba con los ojos cerrados. El efecto de la droga en su cuerpo
estaba haciendo estragos a su mente. Yunho no supo si escucho bien, o si
también estaba delirando a causa del gemido que había escuchado antes.
—¡Bésame! - volvió a exigir jaejoong, esta vez con los
ojos abiertos. Colocando sus manos
atadas detrás de la cabeza de yunho, atrayéndolo por el cuello. Yunho desistió
de tratar de desamarrar los nudos y se dejo guiar por jaejoong, acercándose más
a él.
Dios no sabía si estaba loco o era
la emoción del momento, pero lo deseaba tanto. Ambos tenían fija su mirada a
los labios del otro, tan cerca, aspirando su aroma.
Una sórdida risa los saco de su
ensimismamiento.
..
— No
contesta- dijo finalmente changmin resignado, al no poder contactar con yunho.
— Diablos-
exclamo su manager - ¡Maldita sea!- estaba exasperado y no era para menos, la
presentación de tvxq para ese día se había arruinado por completo.
—¿Por
qué se escaparía? ¿estaría enojado o…asustado? ¿cansado?- dijo uno de los
miembros del staff, en un tono de voz reconciliador, tratando de aliviar el
pesado ambiente que se había formado de repente.
—El
recibió una llamada antes…- dijo la maquillista que había escuchado hablar por
teléfono a yunho. Todos los presentes voltearon a mirarla de inmediato. Tenía
sus brazos cruzados y su cuerpo apoyado en una de las paredes. La pose y la voz
la hacían parecer segura- El menciono un nombre…pero no puedo asegurar si se
trataba exactamente de él…
—¡¿De
quién?!- exclamaron todos al unisonó, repentinamente interesados y curiosos por
saber la respuesta.
—Kim Jaejoong.
Hubo un
silencio sepulcral. Todos se miraron con caras asombradas para luego ser
asustados por el estruendoso grito del manager.
—¡Puta
vida! ¡¿así que se escapo con ese infeliz?!¡maldita sea!
Changmin,
quien no había salido de su asombro, no podía entender nada de lo que estaba
pasando ¿Yunho hyung se ve aun con Jaejoong hyung? No, no podría ser así…yunho
se lo diría ¿o no?, rayos, le dolía la cabeza, esto era extraño.
Aun si
hubiera recibido una llamada de jaejoong, yunho no saldría despavorido dejando
de lado sus obligaciones y su trabajo. Changmin conocía muy bien a su líder.
Algo debió haber pasado, algo muy importante, y necesitaba averiguarlo.
Tenía
que averiguarlo.
..
El dueño de la escalofriante risa
era el hombre, acompañado de otros dos hombres más. Ahora si estaban en
problemas.
—¿Quién te crees para venir y
quitarme a mi jaejoongie, ah?- el tipo menciono colocándole a yunho una pistola
en la cabeza.
Jaejoong palideció.
—¡Sun-woo, Seok Young, amarren a
este bastardo a esa silla!- ordeno.
Los hombres que se veían igual de
robustos, tomaron a yunho por los brazos y lo obligaron a sentarse en una
silla, amarrándolo con sus brazos unidos a sus costados. Luego ambos salieron
de la habitación.
El hombre enseguida gateo hasta
jaejoong, cambiando su semblante serio y temible por uno amable y cariñoso.
—¿Me extrañaste?- pregunto
acariciando el pelo de jaejoong.
Jaejoong lanzo un escupitajo a la
cara del hombre, por lo cual recibió una fuerte bofetada en su mejilla.
—¡Déjelo!- grito Yunho desde su
silla. Intentando librarse del agarre.
—¡Cállate!- ordeno el hombre,
incorporándose del cuerpo de jaejoong para caminar hacia donde estaba yunho.
Yunho tenía una mirada desafiante en
los ojos. No se dejaría intimidar.
—¿Sabes cuánto te odio?- empezó a
decir el hombre- desde que vi a jaejoong lo ame, pero tú siempre estuviste en
el medio, con su fanservice de mierda y su estúpida parejita “yunjae”…cuanto la
odiaba- yunho y jaejoong oían detenidamente lo que el hombre decía- hasta que
se separaron y fue entonces el hombre más feliz del mundo…porque ya no estabas
en mi camino…por que me di cuenta que tu nunca amaste a jaejoong como yo lo
amo- menciono- tu lo abandonaste y negaste, y yo no me podría sentir más dichoso.
Las palabras del hombre de alguna
manera dolían. Ambos se habían hecho tanto daño en todo este tiempo. Las
mentiras, los rumores, las duras decisiones, los habían lastimado tanto para
permitirse alejarse, no volviéndose a ver.
—Voy a disfrutar mucho
destruyéndote- su voz sonaba desquiciada, lanzo lejos la pistola, sacando en su
lugar su cuchillo dispuesto a matar a yunho.
—¡Nooooooo!- Jaejoong grito- yo hare
el amor con usted, ¡hare todo lo que me pida! pero por favor no le haga daño-
dijo entre sollozos.
El hombre al escuchar las palabras
de jaejoong, se olvido de Yunho y se abalanzo contra jaejoong, utilizando su
navaja para cortar el lazo que amarraban sus manos. Por fin, sus manos
estuvieron libres y jaejoong las dejo caer, sintiendo un alivio inmenso. El
hombre hizo lo mismo con sus pies, liberándolos del fuerte amarre.
—Bésame entonces- el hombre exigió-
bésame como nunca has besado a nadie.
Jaejoong miro por un momento a
yunho, el cual tenía una mueca indescifrable en el rostro. Luego, volteo hacia
el hombre, cogiéndolo de la cara, atrayéndolo a sus labios. El beso era
intenso. Jaejoong no podía sentir más asco, era repugnante, pero estaba dispuesto
a hacer eso y mucho más por la seguridad de su amado yunho.
Yunho sentía su sangre hervir en
cólera. La escena lo estaba matando. Ver a jaejoong así, besando de esa manera
a otro hombre, le estaba carcomiendo las entrañas. Yunho ya había besado en
otras ocasiones a jaejoong en el pasado, especialmente cuando estaba borracho,
o cuando se sentía tan afectuoso que le nacía tan solo plantarle pequeños besos
en los labios. Por eso le dolía tanto, que otro pudiera disfrutar de lo que él
había disfrutado en el pasado. No sabía si era ira o puros celos, pero solo
quería ir hasta allá y apartar a ese hombre de su jaejoong.
El beso por fin termino. El hombre
sonrió poniendo una cara de total satisfacción -Dios mío eso fue increíble-
dijo mirando a jaejoong.
Jaejoong volvió a voltear la cara
hacia yunho y yunho rehusó su mirada, fijando su vista a un costado.
—¿Quieres…ahora…hacerme una rica
felación?- dijo incorporándose, bajando el zipper de su pantalón, pero jaejoong
lo interrumpió diciéndole: Solo lo hare…si me dejas besar a Yunho.
Yunho volteo con los ojos bien
abiertos hacia jaejoong.
El hombre puso una mueca de
desagrado pero asintió, diciéndole que era mejor que la mamada estuviera buena.
Jaejoong se levanto caminando
decididamente hacia yunho, este solo lo miraba con una mirada de total
confusión. Jaejoong, entonces se sentó a horcajadas sobre yunho, poniendo ambas
piernas alrededor del cuerpo de este. Cogió su cara y planto sus labios contra
los suyos.
El beso comenzó lento, ambos
disfrutando de los labios del otro, deslizándolos suavemente, disfrutando de su
sabor. Luego se volvieron impacientes. Sus bocas se abrieron mas introduciendo
su lengua en la cavidad del otro. Se besaban como locos. Gemían como dementes
entre besos y sus bocas se movían desesperadamente tratando de sentir más.
Jaejoong rodeo con sus brazos la cabeza de yunho, acercándolo más y Yunho deseo
tanto tener sus brazos libres, para así poder abrazar a jaejoong contra su
cuerpo y que no quedara ni un espacio entre ellos. El beso era tan apasionado
que pronto fueron quedándose sin aire, pero ninguno de los dos quería separar
su boca de la del otro. Al final, no les quedo más que darse pequeños y tiernos
besos para intentar de recuperar todo el aire perdido a causa del intenso
contacto. Ambos abrieron los ojos mientras seguían con los dulces y pequeños
besos, mirándose uno al otro, venerándose uno al otro, amándose uno al otro. De
pronto una fuerza jalo a jaejoong hacia atrás, alejándolo de yunho.
—Es suficiente- el hombre señalo
irritado, empujando a jaejoong de nuevo al colchón.
Bajo sus pantalones mostrando su
miembro, acercándolo hacia la cara de jaejoong. Dios, se le había olvidado que
tenía que hacer semejante cosa.
—Más te vale que lo hagas bien, si
no quieres ver a tu adorado yunho con un puñal atravesado en la garganta-
amenazo el hombre.
Jaejoong no le quedo otra que
obedecer, agarrando el pene entre sus manos, metiéndolo a su boca.
—Bastardo infeliz- maldijo Yunho
entre dientes, mirando con odio al hombre que se retorcía en placer a causa de
la boca de jaejoong.
El hombre quien estaba arrodillado
sobre la cama, con un jaejoong debajo acostado, cogió sus cabellos y empezó a
dirigir el ritmo de la chupada. Jaejoong solo cerraba los ojos fuertemente,
tratando de ignorar todo lo que estaba sucediendo.
El hombre dedico una mirada
triunfante hacia yunho, mordiendo sus labios en satisfacción cada vez que
jaejoong succionaba más fuerte, como si le quisiera decir a yunho lo mucho que
disfrutaba de jaejoong y que él no lo podía gozar de esa manera. Yunho solo
quería pegarle un puñetazo en su asquerosa cara.
El hombre comenzó a gemir más
fuerte, dando aviso que pronto terminaría. Hizo que jaejoong sacara su pene de
la boca y sujetándolo de la cabeza, comenzó a masturbarse para acabar en su boca,
sin embargo, antes de llegar, jaejoong la alejo, por lo que el liquido cayó
sobre su cuello y parte de su cara. No quería tener ese horrible sabor en su
boca. El pene de yunho comenzaba a erguirse gracias a la imagen de un jaejoong
saboreando un pene…definitivamente esa imagen era jodidamente erótica.
—Mmm cada día me encantas mas- dijo
el hombre rato después, cuando se recupero de su fuerte orgasmo.
Jaejoong se limpio las marcas de
semen con su camisa y procedió a mirar nuevamente a yunho. Pudo notar el
vigoroso bulto que se había formado en los pantalones de yunho, haciéndolo
saber que estaba excitado. Yunho tan solo desvió la mirada avergonzado.
—Yo…- susurro Jaejoong-… lameré tus
pezones y tú pecho…- no se le ocurría otra cosa- si me dejas chupárselo a
yunho- dijo en el tono más encantador y coqueto que pudo decir. Sabía que el
hombre no se podría resistir a sus encantos. Yunho al escuchar eso solo pudo
apenarse más, haciendo que su cara se volviera roja por la vergüenza.
El hombre lo medito mucho hasta que
respondió con un: está bien.
Jaejoong gateo ansioso hasta donde
estaba sentado yunho, arrodillándose a la altura de su miembro. Yunho estaba
completamente ruborizado, aunque deseoso de recibir alguna caricia sobre su
miembro. Ya que estaba amarrado, no podía masturbarse a sí mismo, y su pene
dolía. Dios sentía que explotaría.
Jaejoong empezó a desabrochar los
pantalones de yunho, bajándolos hasta las rodillas. En su cara se mostro un
sonrojo evidente cuando vio el miembro de yunho totalmente erguido y excitado. “dios es tan hermoso” pensó yunho al ver
a jaejoong con ligeros tonos carmesí en sus mejillas.
Jaejoong agarro el pene entre sus
manos, lamiéndolo lentamente con su lengua. De arriba hacia abajo. Sentía como
crecía más con cada caricia. Yunho echo su cabeza hacia atrás, dejando salir un
suspiro ahogado. Dios se sentía tan bien. Jaejoong jugó entonces con la punta
de su pene, lamiéndolo, chupándolo y dándole pequeñas mordiditas, mirando de
vez en cuando a yunho con esos ojos seductores. Yunho gemia y lamia sus labios,
dios sí que lo estaba disfrutando. Jaejoong de pronto, metió todo el pene de
yunho en su boca (o bueno lo que alcanzaba a caber) y empezó a mamarlo de
arriba a abajo disfrutando su sabor, su calor, su textura y su tamaño. Siempre
había querido hacer esto con el pene de yunho, y ahora estaba realmente gozando
saborear el pene de yunho y hacer delirar de placer a su dueño.
El hombre los miraba enfurecido,
conteniéndose de separar a jaejoong lejos de Yunho.
Sus movimientos empezaron más
rápidos, provocando húmedos sonidos cada vez que se movía. Yunho solo podía
gemir y sentir el calor de la boca de jaejoong, bajo su mirada y vio como
jaejoong lo observaba con aquellos grandes ojos negros, dios esa mamada y esa
mirada lo harían perder la cordura. No podía aguantar más. Jaejoong sintió como
el pene de yunho comenzaba a vibrar en su boca, dando aviso que pronto
estallaría. Los gemidos de yunho se volvieron más audibles, más intensos,
más…sensuales.
Soltando un último y potente gemido,
yunho se vino en la boca de jaejoong, llenando toda su cavidad con su semen.
Jaejoong trago gustoso toda la semilla que yunho había depositado en su boca. Jae
dejo salir el pene de yunho y pequeños hilos del líquido blanco resbalaron por
la comisura de sus labios.
Yunho sonrió a jaejoong, haciéndole
un gesto con su cara, incitándolo a que se acercara. Jaejoong se acerco igual
con una sonrisa en la cara, mientras yunho lamia los rastros de semen que
resbalaban de su boca.
—Ven aquí- el hombre agarro a
jaejoong por sus caderas volteándolo, obligándolo a mirarlo- no quiero que me
hagas lo que prometiste, yo quiero…- susurro acercándose lentamente al oído de
jaejoong- …quiero penetrarte.
Jaejoong abrió sus ojos en demasía.
No, no le permitiría eso. Nadie podría hacer eso más que…yunho. El hombre lo
abrazo acercándolo más, pero jaejoong en cambio lo empujo fuertemente
alejándolo de él.
Yunho se inquieto en su asiento. No
permitiría que aquel hombre tomara como suyo a jaejoongie. El hombre volvió a
abofetear a jaejoong, y yunho grito maldiciéndole cosas tratando de librarse de
esas cuerdas que lo retenían.
De pronto el hombre se abalanzo
sobre jaejoong, aplastándolo en la cama, tratando de obtener su control.
Jaejoong luchaba pero era muy débil comparado con aquel psicópata, gritaba en
desesperación, clamando por yunho para que lo ayudara, empezando nuevamente a
llorar.
Yunho cerró los ojos. No podía
proteger a jaejoong por la fuerza, tenía que utilizar su ingenio. Se le ocurrió
algo.
—¡Espera!- grito- hagamos un trato.
—¿Qué clase de trato?- pregunto el
fanático, mirando hacia yunho. Jaejoong estaba debajo de el con una mirada asustada,
su cabello echado para atrás y con sus manos sobre el pecho del hombre intentándolo
apartar de su cuerpo.
—Juguemos un juego- dijo yunho, de
repente demasiado confiado en sí mismo, algo que a jaejoong volvía loco, cabe
mencionar- si tu ganas, te quedaras con jaejoong, si yo gano, soy yo que
obtendrá a jaejoong- sabia que eso había sonado como si jaejoong fuera alguna
clase de premio u objeto, pero no se le ocurría otra cosa por tratar de
ayudarlo.
—¿Qué clase de juego?- pregunto
nuevamente el hombre interesado en la propuesta de yunho.
—No se…tal vez…luchas- menciono
yunho con una medio sonrisa de lado- a jaejoong le encantan los hombres que
saben luchar…y que además salen vencedores- dijo yunho echándole una mirada
picara a jaejoong.
Jaejoong le devolvió una mirada de
confusion, antes de entender que era lo que planeaba Yunho. Necesitaba
convencer al hombre de aceptar el trato, y sabía que él era el único que lo
podía lograr.
—Mmmm es cierto…me encantan- dijo
jaejoong con una voz entre mimada y sensual, hasta a yunho dejo momentáneamente
hipnotizado por la forma en la que lo dijo.
—¿Te encantan?- susurro el hombre a
jaejoong, con el mismo tono de voz cariñoso acariciándole lentamente la cara y
los labios.
—Sí.
El hombre sonrió gustoso y se
levanto apretando sus puños, moviendo su cabeza, en señal de preparación de
ataque.
—Está bien Jung Yunho, Acepto.
Juguemos un juego.
..
Jae a logrado engañar al maniático diciéndole cosas que le gusten,ahora si podrán engañarlo y lograr huir de el y los otros dos, ojalá sino les a a ir muy mal. Gracias
ResponderBorrarYunho demuéstrale quien es el rey de Jae ...
ResponderBorrarOk o.o eso fue raro
ResponderBorrarsolo espero que ese hombre no logre su objetivo de violar a jae u.u
Si, lo se XD a veces me pregunto en que estaba pensando cuando escribí este capitulo jajaja
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